La extensión de Basallo marca el inicio de una emocionante etapa en Baltimore

BALTIMORE -- El cuerpo técnico de los Orioles entró a la sala de conferencias de prensa en Camden Yards poco antes de las 2 p.m. del sábado por la tarde. Luego, llegó el infielder Jordan Westburg.

Más jugadores fueron llenando la sala: Adley Rutschman, Gunnar Henderson, Jackson Holliday, Colton Cowser, Coby Mayo y otros. El manager interino Tony Mansolino también se unió al grupo.

Finalmente, apareció el hombre del momento: El dominicano Samuel Basallo, luego de firmar su extensión de ocho años y US$67 millones con Baltimore el viernes. El joven de 21 años estaba acompañado por miembros de su familia, representantes de su agencia y tres de los miembros más importantes de la organización de los Orioles: El vicepresidente de cazatalentos y operaciones internacionales, Koby Pérez, el gerente general Mike Elias y el dueño David Rubenstein.

La sala estaba abarrotada para uno de los eventos más significativos para la franquicia de los Orioles en un buen tiempo.

Para Elias, fue la primera extensión a largo plazo otorgada durante su gestión como gerente general, que comenzó en noviembre del 2018. Para Pérez, fue la culminación de años de construir un programa internacional previamente inexistente que ha sido encabezado por Basallo, quien firmó por US$1.3 millones desde la República Dominicana en el 2021.

En cuanto a Rubenstein, demuestra que su grupo de propietarios, que compró el equipo antes de la temporada del 2024, está dispuesto a gastar, como el multimillonario de capital privado de 76 años había declarado previamente que haría.

Y para Basallo, es un acuerdo que le cambia la vida a él y a su familia —quienes vivieron en un pequeño barrio de Santo Domingo durante su infancia— que también asegura que estará en Baltimore al menos hasta la temporada del 2033 (y quizás hasta la del 2034).

“Lo que voy a hacer es trabajar muy duro para asegurarme de que puedo hacer mi parte”, comentó Basallo. “Sé que es una gran responsabilidad. Pero haré todo lo que esté en mi poder para asegurarme de enorgullecer a la gente que me rodea”.

No ha pasado ni una semana desde que Basallo hizo su debut en MLB. El domingo pasado, el joven receptor llegó a Houston y jugó su primer partido en las Grandes Ligas. Cinco días, y sólo tres juegos después, Basallo estaba firmando el cuarto contrato más grande en la historia de los Orioles.

¿Cómo sucedió tan rápido? Bueno, Elias y los representantes de Basallo comenzaron las conversaciones el día del debut de Basallo. Los Orioles han sabido desde hace mucho tiempo sobre el talento de su principal prospecto (el Nro. 8 en general de MLB Pipeline), considerando que lo firmaron cuando tenía 16 años y lo han visto convertirse en una futura estrella mientras ascendía por las Ligas Menores.

Elias sabía que este cañonero de 6 pies y 4 pulgadas era un jugador que el club quería retener y construir a su alrededor por mucho tiempo.

“Va a ser una parte muy importante de nuestro equipo. Mira, no es fácil concretar este tipo de acuerdos”, señaló Elias. “Trabajamos muy duro en esto, y cada vez que creemos que hay una oportunidad que tiene sentido para ambas partes, es algo que hablamos y exploramos. Nunca es fácil cerrar un trato en este negocio, así que lo celebramos cuando sucede”.

“Nosotros, como gerencia, como grupo de propietarios y como organización, siempre vamos a seguir buscando hacer buenas inversiones, ya sea intentando extender los contratos de nuestros propios jugadores o en cualquier otra cosa que hagamos”.

Mientras Elias hablaba —sentado entre Rubenstein y Basallo en el estrado—, muchos posibles candidatos a extensión lo miraban desde sus asientos. Jugadores como Rutschman, Henderson, Holliday, Westburg, Cowser, Mayo y otros componen el núcleo joven, y son jugadores que los Orioles podrían necesitar durante mucho tiempo si esperan alcanzar su objetivo de un éxito sostenido a largo plazo.

Los Orioles saben que ese es el caso, y les gustaría que la extensión de Basallo fuera la primera de muchas.

“El grupo de propietarios de los Orioles tiene un buen respaldo financiero, y tenemos los recursos para hacer este tipo de acuerdos. Se necesitan dos partes para llegar a un acuerdo, pero pensamos que este era perfecto para ser el primero de este tipo”, dijo Rubenstein. “Los mejores jugadores que han pasado por los Orioles históricamente han sido formados en casa. Así que Jim Palmer, toda su carrera estuvo aquí. Brooks Robinson, toda su carrera, aquí. Cal Ripken, toda su carrera, aquí.

“Hemos tenido una tradición de contar jugadores que pasan toda su carrera aquí, y esperamos que Samuel también lo haga. Tenemos muchas otras personas talentosas en el equipo con quienes esperamos que eventualmente quieran pasar toda su carrera aquí, o establecer acuerdos a largo plazo con nosotros, y estamos comprometidos a hacer más de estos acuerdos tan pronto como podamos”.

Rubenstein reiteró que los Orioles “esperan poder tener otros acuerdos como este en algún momento”, que su grupo y la oficina principal “van a trabajar en eso” y que “esperan construir el equipo hasta el punto de que sea el mejor equipo del béisbol”.

Seguramente fue importante para los jugadores de Baltimore escuchar ese compromiso por parte de Elias y Rubenstein en medio de una temporada que ha sido bastante difícil. Los Orioles llegaron al sábado con un récord de 59-69 en una campaña empañada por lesiones que probablemente no incluirá un tercer viaje consecutivo a la postemporada.

Pero ha habido puntos brillantes, y quizás ninguno mayor que el nuevo acuerdo de Basallo. Los Orioles han demostrado ahora que están dispuestos a hacer este tipo de compromisos, y pronto podrían realizarse conferencias de prensa similares en la misma sala, ya sea en un futuro cercano o un poco más adelante.

Como dijo Holliday el viernes por la noche, el núcleo joven de Baltimore disfruta jugar juntos y “les encantaría hacerlo durante mucho tiempo”. Y ahora, ese grupo está destinado a construirse en torno a Basallo, quien agradeció el apoyo tan temprano en su carrera en Grandes Ligas.

“Se siente muy bien y muy especial tener aquí a todos mis compañeros, entrenadores, preparadores físicos. Sé que acabo de llegar, pero tenerlos aquí realmente significa mucho para mí”, dijo Basallo. “Creo que, durante los próximos ocho años, todos vamos a tratar de dar lo mejor de nosotros como grupo para intentar ganar lo más posible”.