ATLANTA -- Andrés Muñoz podría no ser el miembro más famoso de su hogar.
Matilda, la gata persa de 14 años del cerrador mexicano de los Marineros, se ha convertido en una celebridad en las redes sociales entre los fanáticos del noroeste del Pacífico, pero su mejor contenido hasta ahora se publicó el martes, antes del Juego de Estrellas en Truist Park.
Muñoz, literalmente, desenrolló la alfombra roja para Matilda desde su habitación de hotel, con la ayuda del equipo de redes sociales de los Marineros y de su esposa, Wendy, quien estaba en Atlanta para acompañarlo en su segunda selección consecutiva al Clásico de Media Temporada.
El lanzallamas ponderó llevar a Matilda por la alfombra roja oficial junto con el resto de las estrellas en The Battery Atlanta, al punto que el club consultó con MLB si eso estaba permitido. Pero Muñoz decidió no hacerlo debido a los desafíos logísticos, el calor y la humedad extremos, y la gran multitud que podría afectar la reacción de Matilda.
Muñoz ponderó llevar a Matilda por la alfombra roja oficial junto con el resto de las estrellas en The Battery Atlanta, al punto que el club consultó con MLB si eso estaba permitido. Pero Muñoz decidió no hacerlo debido a los desafíos logísticos, el calor y la humedad extremos, y la gran multitud que podría afectar la reacción de Matilda.
Pero eso no fue todo el contenido.
El sinaloense también recibió un guante personalizado de 44 Pro para el Juego de Estrellas con una imagen de Matilda bordada. El guante es de cuero azul marino para combinar con su uniforme de visitante de los Marineros, con una versión caricaturesca del rostro de Matilda —en tono de broma con expresión gruñona, por su gesto natural— en la malla del guante, con huellas blancas de gato en el dedo externo y la bandera de México en el dedo interno.
El guante era tan nuevo que aún tenía que ablandarlo, pero tenía toda la intención de usarlo si le tocaba lanzar en el juego del martes
“Es muy especial para mí”, dijo Muñoz, “porque sabemos cuánto ha cambiado su vida, lo diferente que es todo para ella ahora. No sé cuántos años pasó en una condición muy mala. Y verla aquí, disfrutando todo esto, realmente es muy lindo”.
Muñoz y Wendy adoptaron a Matilda hace algunos años en su ciudad natal de Los Mochis.
“Cuando la trajimos, fue muy difícil, porque no podíamos acercarnos a ella”, dijo Muñoz. “No podíamos acariciarla. Y no sé si ya viste en algunos de los videos, ahora sí podemos acariciarla, jugar un poco con ella. Así que ha sido un cambio muy grande, y sabemos que con todo el amor que le damos, ella seguirá mejorando”.
Las imágenes compartidas de Matilda han sido muy divertidas para Muñoz en un nivel más superficial, y una forma de que los fanáticos vean su lado extremadamente tierno, que contrasta con su personalidad de lanzallamas en el montículo. Porque en el terreno, se ha convertido en uno de los mejores relevistas del béisbol, llegando al receso del Juego de Estrellas empatado en el cuarto lugar entre relevistas con una efectividad de 1.50 y empatado en el quinto lugar en salvamentos con 21.
Pero tiene una de las personalidades más bondadosas en el vestidor de los Marineros, y su amor por Matilda —y por los gatos en general— lo resume todo perfectamente.
“Este año lo estamos compartiendo un poco más”, dijo Muñoz. “Pero siempre tratamos de hacer ese tipo de cosas. Y es muy bonito ver cómo, con un pequeño gesto, puedes ayudar tanto. Así que trato de hacerlo cada vez que puedo, y tal vez hasta inspirar a alguien más a hacer lo mismo”.
A principios de esta temporada, Muñoz se asoció con un refugio local de gatos —Seattle Area Feline Rescue (SAFe)— y subastó un paquete de experiencias que incluía entradas para un juego de los Marineros, acceso a la práctica de bateo y un encuentro con Muñoz. La iniciativa recaudó cerca de US$15,000 a través de la subasta y otras donaciones, y el refugio recibió una serie de regalos adicionales de la comunidad a través de otras plataformas de donación que mencionaban a Muñoz. También asistirá a un evento de adopción con el refugio este sábado, una vez que regrese a Seattle.
Poco después, los Marineros crearon una camiseta personalizada de Muñoz y Matilda imitando un cartel de película que decía: “Fast and Furriest” — y al menos una fue vista en el Juego de Estrellas.
A medida que crece el perfil público de Muñoz, también lo hace el de Matilda — alcanzando el mayor escenario del béisbol con su última aparición.