Raleigh con histórico 57mo HR ayuda a Marineros a despegarse en el Oeste
This browser does not support the video element.
HOUSTON -- Establecer un récord de franquicia de jonrones en una temporada tiene un enorme significado. Pero podría decirse que cobra un peso aún mayor en Seattle, donde por casi tres décadas ha estado en manos no sólo de un miembro del Salón de la Fama por votación unánime, sino de uno de los más grandes que haya jugado este deporte.
Y ahora Ken Griffey Jr. ha cedido su lugar en la cima de la lista histórica de los Marineros, abriéndole paso al más reciente —y quizá más monumental— capítulo de la histórica campaña de Cal Raleigh.
Raleigh disparó su jonrón número 57 en la victoria 6-4 del sábado, y si no iba a lograr la hazaña en casa, todo el contexto en el que lo consiguió fue casi igual de dulce.
El equipo rival. El lanzador rival. El estadio. El lugar donde cayó la pelota. El momento del juego. Y la importancia de la temporada.
Raleigh castigó un sinker en cuenta de 0-2 de Framber Valdez en la tercera entrada, un pitcheo que se alejaba de la zona en lo alto, y lo envió a 399 pies hacia el jardín contrario, directo al bullpen local en el Daikin Park, silenciando a otro lleno total en esta serie colosal que podría definir el Oeste de la Liga Americana.
Los ecos más sonoros fueron los gritos de “MVP” de los aficionados de los Marineros que viajaron a territorio enemigo. Seattle no les había dado mucho de qué alegrarse a sus rivales divisionales de toda la vida en todo el fin de semana, hasta que Houston casi armó una gran remontada.
Entonces, Víctor Robles sentenció el juego con la atrapada de la temporada para Seattle.
Para cuando Raleigh habló después del partido, tras toda la intensidad del sábado, confesó que su jonrón “parece que fue hace mucho tiempo”.
“La victoria fue increíble”, dijo Raleigh. “Ni siquiera pensé en el jonrón. Lo pensé mientras daba la vuelta a las bases y nada más. Después regresé al juego”.
La histórica temporada de Raleigh ya incluía las marcas de más jonrones para un bateador ambidiestro (superando los 54 de Mickey Mantle en 1961), un receptor titular (los 48 de Salvador Pérez en 2021) y cualquier receptor (los 42 de Javy López en 2003).
Pero el récord de franquicia es, sin duda, la joya de la corona, sobre todo por quién lo tenía antes: un jugador que sigue siendo tan famoso en Seattle y en todo el béisbol como cuando se retiró en 2010.
“Es algo extraño, muy extraño de pensar”, dijo Raleigh. “No lo puedo comprender ni asimilar del todo aún. Estoy muy agradecido por ello. Y definitivamente se siente raro estar en la misma frase con él”.
This browser does not support the video element.
Griffey, en un mensaje de texto compartido a la prensa local, dijo que espera felicitar a Raleigh en persona, aunque no podrá asistir a la última estadía en casa de los Marineros en la temporada regular por compromisos previos. Sin embargo, hay una gran posibilidad de que esté en Seattle si logran llegar a la postemporada.
“Él se ha comunicado un par de veces”, dijo Raleigh. “Ha estado en el T-Mobile [Park] un par de veces también. Es increíble, un gran tipo. Siempre es divertido tenerlo en el clubhouse y, obviamente, pude pasar tiempo con él en el Juego de Estrellas y el Festival de Jonrones. Fue una experiencia genial, y estoy seguro de que tendrá algo que decirme ahora”.
La próxima meta de Raleigh para unirse a Griffey sería conquistar el Oeste de la Liga Americana, algo que los Marineros lograron cuando Griffey fijó el récord de la franquicia en 1997 y lo igualó en 1998. Si Seattle se corona, también habría una gran posibilidad de que Raleigh se una a Griffey (1997) e Ichiro Suzuki (2001) como los únicos jugadores de la franquicia en ganar el JMV de la Liga Americana.