CHICAGO -- El vínculo entre Luis Robert Jr. y Miguel Vargas se remonta al menos al año 2015, cuando ambos formaban parte del equipo nacional juvenil de Cuba que participó en la Copa Mundial de Béisbol Sub-18 en Japón.
Actualmente, sus casilleros están ubicados uno junto al otro en la esquina trasera izquierda del clubhouse local de los Medias Blancas en el Rate Field, donde los del Sur de Chicago sufrieron una derrota de 10-2 ante los Yankees la noche del viernes, su cuarta caída consecutiva y el tercer juego seguido en el que permiten cifras dobles en carreras.
Lamentablemente, tanto Robert como Vargas se encuentran en proceso de rehabilitación por lesiones, cuando queda aproximadamente un mes para que finalice la temporada 2025. Pero incluso en medio de una campaña con récord de 48-87, Robert y Vargas siguen pensando en ganar en Chicago.
“Cien por ciento, cien por ciento”, dijo Vargas. “Eso es de lo que hablamos todo el tiempo: cómo podemos ser mejores para ganar juegos, cómo podemos ayudar a nuestros compañeros a mejorar. Para nosotros, es nuestro sueño.
“Estamos tratando de construir ese sueño, estamos tratando de crear una buena cultura entre nosotros dos. Me alegra tenerlo como compañero de equipo, y pasar tiempo con él ha sido una de las mejores cosas que me han pasado esta temporada.”
Vargas fue colocado en la lista de lesionados de 10 días antes del partido del viernes, y Tim Elko se unió al equipo desde Triple-A Charlotte, luego de que Vargas sufriera un esguince en la mano izquierda durante la derrota del jueves ante los Yankees. La lesión pareció mucho más grave en el momento, cuando su mano con el guante chocó con el muslo de Aaron Judge mientras intentaba atrapar un tiro rebotado de Curtis Mead desde la tercera base.
Las pruebas y evaluaciones adicionales realizadas el viernes no mostraron fracturas ni daño en los ligamentos, lo que permite a Vargas enfocarse en su recuperación de la forma más cómoda posible.
A Robert se le diagnosticó una distensión de grado 2 en el tendón de la corva izquierda, luego de abandonar el juego del martes contra los Reales en la cuarta entrada. Su mentalidad es volver a jugar en el 2025, aunque no está seguro de si habrá suficiente tiempo para ello.
Así que, si este dúo de amigos quiere ganar en Chicago, tendrá que comenzar a forjarlo en algún momento de la temporada 2026. Los White Sox parecen tener la intención de ejercer la opción de US$20 millones en el contrato de Robert, pero él sabe que eso no garantiza necesariamente que seguirá con el equipo para el Día Inaugural o los entrenamientos primaverales.
El deseo de Robert es ganar con el único equipo que ha conocido a nivel de Grandes Ligas.
“Sí, sé que existe la posibilidad de que me quede aquí por dos años — ese es mi contrato, ¿cierto?” dijo Robert, ya que los Medias Blancas tienen otra opción de US$20 millones para el 2027 y una cláusula de rescisión de US$2 millones para cualquiera de los dos años.
“Estaré feliz de quedarme aquí mientras ellos quieran que esté aquí. Pero también sé que estas son cosas que pueden cambiar”, dijo Robert. “Definitivamente, me gustaría quedarme. Quiero ser parte de este equipo hacia el futuro. Es algo bueno.”
El gerente general Chris Getz expresó el compromiso de la organización con Robert tras su última lesión, algo que el toletero cubano valoró. Sin la presencia de Robert y Vargas en la parte gruesa del orden ofensivo, los Medias Blancas cayeron a su peor marca de la temporada, con 39 juegos por debajo de .500, al perder ante Carlos Rodón (15-7), quien hizo su primera apertura como visitante en el Rate Field, luego de haber realizado 116 aperturas como parte de los Medias Blancas entre 2015 y 2021.
Se han visto señales de mejoría en este equipo de los White Sox, desde una racha de 10-4 después del Juego de Estrellas hasta una ofensiva mucho más potente en la segunda mitad, con 58 jonrones y 198 carreras anotadas. Esas señales positivas también se reflejaron a nivel individual para Vargas durante toda la temporada y para Robert, ofensivamente, desde comienzos de julio, pero por ahora ambos estarán relegados a ser compañeros de equipo en apoyo desde fuera del terreno.
“Esas son cosas a las que estamos expuestos cuando salimos al terreno”, dijo Robert sobre las lesiones. “[Vargas] estaba teniendo una gran temporada, un buen juego anoche, y pasó eso. Fue difícil para mí ver cómo cayó tan fuerte, pero, nuevamente, no hay nada que uno pueda hacer al respecto. Cosas así pasan en el juego.”