KANSAS CITY -- En el capítulo más reciente de una rivalidad en desarrollo entre Jazz Chisholm Jr., de los Yankees, y el dominicano Maikel García, de los Reales, los dos nuevamente intercambiaron palabras por una jugada física en las bases tras la victoria de Nueva York por 10-2 el martes en el Kauffman Stadium.
La jugada en cuestión en este caso fue el robo de tercera base por parte de Chisholm en la sexta entrada. El tercera base de los Yankees se deslizó de cabeza hacia la almohadilla, donde García esperaba un tiro del receptor venezolano Freddy Fermín. La bola llegó justo por encima de la cabeza de Chisholm al mismo tiempo que este llegaba la base, mientras García intentaba atrapar la bola y aplicar el toque en un sólo movimiento —lo que provocó que el casco de Chisholm saliera volando cuando recibió el toque en la parte superior de la cabeza, que chocó directamente con la rodilla de García.
Chisholm fue retirado del juego en la parte baja del séptimo inning por rigidez en el cuello y una cortada en el pulgar derecho, pero dijo que espera jugar el miércoles.
“Simplemente siento que cada vez que hay un problema, siempre es con él [García]”, comentó Chisholm. “Esa es la única razón por la que estaba tan frustrado. Y luego, ver que ni siquiera tenía la bola cuando me aplicó ese toque… no me gustó. ¿Sabes a lo que me refiero? Sólo frustración, eso es todo”.
García dijo que solo estaba “tratando de hacer su trabajo” al tocar a Chisholm.
“Se me fue la bola”, dijo García.
Después del toque, la transmisión pareció captar a Chisholm diciendo que “le daría una bofetada” a García si volvía a hacerle un toque así.
“Estoy esperando”, respondió García, quien no escuchó el comentario en ese momento, pero se enteró después del juego. “Sólo son palabras”.
Esta disputa comenzó después del Juego 2 de la Serie Divisional de la Liga Americana del 2024, cuando Chisholm dijo que los Reales “sólo tuvieron suerte” tras su victoria 4-2 sobre los Yankees. Chisholm fue recibido con fuertes abucheos durante los Juegos 3 y 4 en el Kauffman Stadium en la postemporada, y esos abucheos continuaron la noche del martes.
“Me sigue gustando ser el villano”, dijo Chisholm. “Sí, creo que cuando fui al plato hoy le dije a Fermín: ‘Me gusta un poco’. No estoy en casa, así que no espero que… preferiría caminar hacia algo, ¿sabes?, en vez de caminar en completo silencio. Siento que cuando un bateador visitante sube y no pasa nada, es aburrido. Vamos, abúchenme, al menos me están poniendo música mientras camino [al plato]”.
En el Juego 4 de la SDLA, los ánimos volvieron a encenderse cuando García se deslizó agresivamente hacia el campocorto de los Yankees, Anthony Volpe, quien respondió con un toque alto en la zona de la cabeza/cuello de García, luego le dio una palmada en la espalda y lo señaló hacia el dugout de los Reales. Chisholm llegó desde tercera base para gritarle a García, lo que provocó que se vaciaran las bancas.
Después del Juego 4, Chisholm llamó a García “mal perdedor” durante la celebración en el clubhouse de los Yankees, en respuesta a la barrida.
García mencionó esa jugada y ese toque el martes, pero en cuanto a si todo esto se trasladará al miércoles y jueves, el antesalista de los Reales se mostró más enfocado en ayudar a Kansas City a volver a la senda del triunfo.
“No lo sé. Solo trato de jugar mi juego y ganar partidos”, dijo García.