Han sido unos días ajetreados para los Medias Rojas, que han acordado pactos de largo plazo con dos de sus jugadores más importantes durante la primera semana de la temporada.
Después de firmar a Garrett Crochet a un pacto de seis años y US$170 millones el martes, los Medias Rojas anunciaron un contrato de ocho campañas con el novato Kristian Campbell el miércoles. El contrato tiene un valor garantizado de US$60 millones, le informó una fuente a Mark Feinsand de MLB.com, es del 2025 al 2032 e incluye opciones del club para el 2033 y el 2034.
Campbell, de 22 años, ha tenido un ascenso meteórico desde que fue seleccionado en la cuarta ronda del Draft amateur del 2023, hasta ser titular en la intermedia para los Medias Rojas en el Día Inaugural este año. Visto como el prospecto número 6 de las Grandes Ligas por MLB Pipeline, Campbell no ha perdido tiempo en validar las expectativas generadas.
Campbell conectó seis hits en sus primeros cuatro encuentros, incluyendo su primer jonrón el sábado pasado contra los Rangers, un batazo de 431 pies que salió de su bate a 112.2 millas por hora. El joven cañonero ya ha mostrado un poder y una velocidad con su bate impresionantes para un jugador que aporta muchas otras herramientas al juego.
Después de pasar menos de una semana en las Mayores, Campbell ha firmado una de las extensiones de contrato más tempranas en la historia de MLB, similar al acuerdo de ocho años y US$50 millones que su compañero Ceddanne Rafaela firmó en abril pasado con apenas 49 días de tiempo de servicio.
Mantener a jugadores como Crochet y Campbell a bordo para el futuro pone a Boston en una posición óptima para construir un equipo ganador sostenible. Con jugadores establecidos como el dominicano Rafael Devers, Alex Bregman, Jarren Durán y Tanner Houck en el equipo y los inminentes ascensos de los prospectos principales Roman Anthony (Nro. 2 global según Pipeline) y el mexicano Marcelo Mayer (Nro. 11), se vislumbran cosas buenas en el horizonte para los Medias Rojas.