FILADELFIA - Cuando los Filis entraron al camerino el sábado por la tarde, todos los jugadores tenían una camiseta nueva colgada en el espaldar de la silla frente a su casillero.
Era una camiseta azul claro con la imagen de Harrison Bader y su frase favorita: "¡Qué regalo!".
Sin ofender a Bader, los Filis esperan encontrar un regalo mucho mejor esperándolos en el vestuario el domingo.
Con su victoria por 8-6 sobre los Reales el sábado en el Citizens Bank Park, sumada a la derrota de los Mets por 3-2 ante los Rangers, el número mágico de los Filis para asegurar el título del Este de la Liga Nacional se redujo a uno. Eso significa que si ganan de nuevo el domingo o los Mets vuelven a perder, los Filis se retirarán al vestuario después del partido para encontrar esos mismos casilleros cubiertos con lonas, esperando una celebración con champán.
Los regalos no han parado de llegar durante toda la semana para los Filis (89-60), quienes han ganado seis juegos consecutivos. Esa racha comenzó con una barrida de cuatro juegos sobre sus rivales Mets, quienes ahora están 13 juegos detrás en la División Este de la Liga Nacional tras su octava derrota consecutiva.
La última victoria de Filadelfia siguió un guion demasiado familiar: Bader registró otro juego de múltiples hits, Kyle Schwarber conectó otro jonrón y los Filis recibieron contribuciones de toda la alineación.
Bader se fue de 4-3 y anotó un par de carreras. Fue su sexto juego consecutivo de múltiples hits, la racha más larga para un jugador de los Filis desde 2022 (Alec Bohm).
Schwarber, por su parte, conectó su jonrón número 51 de la temporada en una noche en la que se embasó cuatro veces. Todavía tiene posibilidades de alcanzar el récord de 58 jonrones de Ryan Howard (2006).
Los Filis han sumado 43 carreras y 61 hits durante su racha de seis victorias consecutivas. La única otra vez en los últimos 40 años que alcanzaron esas cifras con seis victorias consecutivas fue en 2007.
Todo esto ha puesto a los Filis a punto de asegurar el título de la División Este de la Liga Nacional frente a su afición local antes de embarcarse en una gira de seis juegos, algo que parecía inimaginable al comienzo de la semana.