SEATTLE -- El roster de los Orioles ha estado en constante movimiento durante buena parte de los últimos dos meses, en gran medida debido a los problemas de lesiones que actualmente tienen a 11 jugadores fuera de acción. Por lo tanto, el grupo lucía un poco diferente el martes –cuando el jardinero Colton Cowser regresó de una fractura en el pulgar izquierdo– de como estaba cuando sufrió el problema el 30 de marzo.
¿Notó Cowser alguna energía o ambiente diferente?
“He estado aquí por un gran total de dos horas”, bromeó Cowser antes del primer juego de la serie en Seattle. “Pero se siente bien. Se siente bien estar de nuevo con los muchachos. Siento que tenemos personalidades realmente buenas en este clubhouse sin importar quién llegue”.
Ninguna de esas personalidades es más grande que la de Cowser, quien inmediatamente tuvo un impacto al conectar un jonrón solitario en la sexta entrada en la victoria de los Orioles 5-1 sobre los Marineros, que extendió la racha de triunfos de Baltimore a cuatro, la más larga de la temporada. Pero no sin antes haberse divertido un poco y provocado algunas risas en el clubhouse visitante en el T-Mobile Park más temprano ese día.
El tema: Los camarones.
Todo surgió de una publicación en redes sociales de Topps el lunes, cuando la compañía de tarjetas coleccionables publicó un adelanto de una tarjeta autografiada de Gunnar Henderson. En esta en particular (numerada 17 de 20), Henderson firmó su nombre y también escribió: “Cowser le tiene miedo a los camarones”.
Henderson firmó la tarjeta durante la pretemporada, cuando muchos jugadores de los Orioles realizaron viajes de pesca en grupo. Usaban camarones como carnada. Y ya se podrán imaginar hacia dónde va esta historia…
“Una vez, uno saltó de mi mano y tuve que recogerlo del suelo, y me tomó un poco más de tiempo porque estaba en la rendija de la cubierta [del bote]”, contó Cowser. “Así que él asumió que les tenía miedo”.
Cowser quería aclarar las cosas.
"Por cierto, no le tengo miedo a los camarones”, aclaró Cowser. “Sí agarro el camarón”.
Estén atentos, porque Henderson podría tener algunas otras sorpresas ocultas por cortesía de Topps. Cowser dio una pista, pero se detuvo antes de revelar más.
“Escuché que escribió un par de otras cosas en algunas tarjetas, así que estén pendientes de eso”, dijo Cowser. “Sé que en una de las tarjetas únicas (1 de 1) dijo algo que… aparentemente lo escribió, no sé qué escribió”.
Quizás lo descubramos muy pronto.
La anécdota del camarón –que luego se convirtió en tema de conversación entre varios jugadores mientras Cowser ponía al tanto a los demás– es un ejemplo perfecto de lo que los Orioles extrañaban del jardinero de 25 años durante los últimos dos meses. Su gran energía y personalidad particular han sido un factor impulsor del ambiente positivo en el clubhouse de Baltimore en los últimos años.