PORT CHARLOTTE, Florida -- Con dos de los prospectos más veloces en todo el béisbol bateando de manera consecutiva en el Spring Breakout, no debería ser una sorpresa que se desatara una competencia de atletismo.
Los jardineros de los Rays, Chandler Simpson y Homer Bush Jr., demostraron pura velocidad en la victoria de los prospectos de Tampa Bay por 7-5 sobre las promesas de los Medias Rojas el jueves por la en el Charlotte Sports Park, posiblemente el punto más brillante en la vitrina de prospectos durante el choque entre dos de los mejores sistemas de Ligas Menores en todo el béisbol.
El cotizado prospecto, Carson Williams, también se hizo sentir en las últimas entradas, conectando un jonrón solitario entre el jardín izquierdo y central en el octavo inning.
“Es una gran muestra de lo buenos que son ambos equipos”, expresó Williams, quien se hizo sentir con su bambinazo que tuvo una velocidad de salida de 107 mph y 413 pies de distancia. “Bastante bateo, buena defensa. Y fue bastante divertido jugar en este partido”.
Simpson y Bush cuentan con una velocidad de clasificación de 80 en la escala de evaluación tradicional de 20-80. Si Bush (el prospecto Nro. 17 de los Rays, según MLB Pipeline) es un corredor de máxima categoría, Simpson (Nro. 7) podría romper la escala por completo. Pero ambos son velocistas en las bases, y pusieron sus piernas a buen uso contra los Patirrojos.
Bateando de noveno, Bush inició la tercera entrada conectando un rodado hacia la segunda base y corriendo hacia la inicial. Su velocidad ayudó a obligar un error, permitiéndole embasarse. Lo siguió Simpson, el primer bate de Tampa Bay.
Buscando aprovechar a lo máximo todas sus capacidades que tienen un estilo de la vieja escuela, Simpson ha trabajado arduamente en su toque de bola a lo largo de los años. Ha estudiado videos de otros velocistas como Dee Strange-Gordon y Billy Hamilton, observando cómo amortiguaban la bola y la empujaban hacia la tercera base. Practica su toque durante y después de las prácticas de bateo.
"Sé que es otra herramienta en mi caja para embasarme, definitivamente, cuando la oportunidad se presente en cierta situación del juego", dijo Simpson recientemente. "Quiero asegurarme de perfeccionar la habilidad y pulirla cuando necesite emplearla".
Hizo precisamente eso contra los Medias Rojas, dejando caer un toque de bola perfecto y luego corriendo a la primera base. Entonces, comenzó el despliegue de velocidad.
“Siempre que estábamos en la primera y segunda base, fue una de esas situaciones como, ‘Lo entendido ni siquiera se dice’. Íbamos a correr”, explicó Bush. “Estamos en la misma sintonía mental”.
“Sabía lo que íbamos a hacer. Sabía que saldría a correr”, afirmó Simpson. “Me hizo una señal con la cabeza. Le hice la misma señal con la cabeza. De repente estábamos en la segunda y tercera base”.
Simpson y Bush despegaron mientras el derecho de Boston, Connelly Early, se enfrentaba a Williams. Bush se deslizó y quedó quieto en la tercera base, y luego anotó en el roletazo de Williams a la primera base. Obviamente, Simpson avanzó en el rodado y anotó con el sencillo de Bob Seymour al bosque derecho.
“Pusieron todo en marcha para que consiguiéramos la primera carrera. Pude darle a una y ellos anotaron por ese doble robo”, declaró Williams. “Eso nos dio la victoria, fue genial”.
Lo hicieron otra vez en el cuarto capítulo. Con corredores en segunda y tercera, Bush conectó un imparable productor a la pradera derecha e inmediatamente se robó la intermedia. Simpson empleó su notable capacidad de contacto para dar una línea al jardín derecho, remolcando al corredor desde la tercera base con un elevado de sacrificio. Bush luego anotó con el sencillo de Brayden Taylor al bosque derecho, coronando un ataque de tres vueltas de los Rays.
La gran jornada de velocidad de los Rays generó después una obvia pregunta: ¿Quién gana en una carrera, Simpson o Bush?
“Creo que él me ganaría en una corta. Pienso que yo le ganaría en una más larga”, contestó Bush con una sonrisa. “Pero creo que ambas estarían muy reñidas”.
“Hoy lo demostró”, agregó Simpson también sonriendo. “De todas maneras digo que yo le gano a cualquiera, pero él tuvo un gran partido”.