La histórica racha de bases robadas de los Mets llegó a su fin, aunque no se trató de un out clásico en intento de robo.
Los Mets habían conseguido robar 39 bases consecutivas esta temporada sin ser atrapados. Pero la seguidilla terminó cuando el puertorriqueño Francisco Lindor fue sorprendido en la primera base en la primera entrada del Clásico de Pequeñas Ligas. Esa jugada de revirada contó estadísticamente como un out en intento de robo, lo que puso fin a la marca.
La racha de Nueva York estaba empatada con la de los Medias Rojas del 2013 como la más larga en una sola campaña en la historia de MLB. (Las estadísticas de corredores atrapados robando se registran desde 1920 en la Liga Americana y desde 1951 en la Liga Nacional).
Además, los Mets se quedaron a una base robada del récord absoluto de 40 (sin importar la temporada), establecido por esos mismos Medias Rojas en un tramo que se extendió del 2013 al 2014.
Entonces, ¿por qué la revirada a Lindor rompió la racha si no fue retirado en segunda por el receptor, como suele ocurrir en un intento de robo?
Porque hizo un movimiento hacia la siguiente base. En la jugada, Lindor estaba lejos de la inicial, lo que llevó al lanzador de los Marineros, George Kirby, a tirar rápidamente a la primera base. Lindor quedó atrapado y, cuando el inicialista Josh Naylor recibió la pelota, el boricua dio unos pasos hacia segunda. Luego se detuvo en el camino antes de intentar regresar a primera con un deslizamiento desesperado para evitar el toque de Naylor.
Esos pasos hacia la intermedia fueron los que acabaron con la racha de estafadas de los Mets. Esa acción hace que la jugada se contabilice como out en intento de robo, además de ser una revirada. Si Lindor simplemente hubiera intentado regresar a la inicial y era puesto out, sólo habría sido revirada.
De acuerdo con la Regla Oficial de MLB 9.07(h)(2): “El anotador oficial deberá cargar al corredor con ‘out en intento de robo’ si es puesto out, o hubiera sido puesto out de no mediar error, cuando es sorprendido fuera de la base y trata de avanzar (cualquier movimiento hacia la siguiente base se considerará como un intento de avanzar)”.
Esa última parte lo deja claro: Cualquier movimiento hacia la siguiente base obliga a que la jugada se registre como out en intento de robo. Lindor definitivamente hizo ese movimiento. Por eso, la racha de los Mets llegó a su fin.