FILADELFIA -- El mánager de los Filis, Rob Thomson, no estaba listo para hablar sobre el enfrentamiento de esta semana con los Mets la mañana del domingo.
En cambio, quería que su club se centrara por completo en el juego contra los Nacionales en el Citizens Bank Park.
Se puede decir que los Filis hicieron exactamente eso en una victoria de 3-2 para llevarse la serie. El venezolano Ranger Suárez estuvo dominante una vez más, acumulando un tope personal de 11 ponches en siete innings en blanco. Esa fue su segunda salida consecutiva con al menos 10 ponches después de haber registrado solo dos aperturas de dobles dígitos en sus primeras 111 aperturas en las Grandes Ligas antes de esta semana.
Suárez tiene 21 ponches y cero bases por bolas en sus dos últimos dos juegos, permitiendo solo dos anotaciones en 13.2 innings. En general, los abridores de los Filis dejaron una efectividad de 2.37 con 46 ponches en 30.1 innings en este último turno de la rotación, su primera vuelta completa desde que perdieron a Zack Wheeler por el resto de la temporada.
Con la serie ganada, los Filis ahora pueden concentrar su atención en el duelo de tres juegos de esta semana contra los Mets, sus grandes rivales de la División Este de la Liga Nacional.
Filadelfia (76-54) viaja al Citi Field con una ventaja de siete juegos sobre Nueva York (69-61) en la cima del Este de la Liga Nacional. La ventaja de siete juegos está empatada como la mayor de Filadelfia en la temporada.
Sin embargo, a partir del primer juego de la serie del lunes, los dos clubes aún tienen siete encuentros restantes este año.
“Todavía queda mucho béisbol por jugar, y todavía nos quedan muchos juegos contra ellos específicamente”, dijo el bateador designado Kyle Schwarber. “No vamos a ir allí con una mentalidad relajada ni nada por el estilo. Vamos a ir a resolver este asunto”.
Los Filis saben que las cosas pueden cambiar rápidamente, especialmente dados sus recientes problemas contra los Mets, particularmente en el Citi Field. Los Filis fueron barridos en una serie de tres juegos en Nueva York del 21 al 23 de abril, y han perdido siete juegos consecutivos en el Citi Field, que se remontan al año pasado, incluidos los Juegos 3 y 4 de la Serie Divisional de la Liga Nacional para terminar su temporada.
“Cada vez que salimos del clubhouse, la mentalidad es la misma, nada cambia”, siguió Schwarber. “No importa [si es] en casa, de visita, un juego de exhibición, vamos con la misma mentalidad. Sabemos de lo que son capaces. Sabemos que son un buen equipo”.
Por supuesto, los dos clubes se están moviendo en direcciones opuestas últimamente.
Los Filis tienen marca de 15-7 en agosto, mientras que los Mets tienen registro de 7-14. Eso es un cambio de siete juegos y medio en solo tres semanas y media.
“También puede ir en la otra dirección”, dijo Thomson. “Así que tenemos que prestar atención”.