BOSTON -- Durante seis entradas, los bates de Boston, que habían estado encendidos últimamente, se enfriaron, logrando solo dos imparables.
Pero en la séptima, los Medias Rojas armaron una remontada de tres carreras que allanó el camino para una victoria por 4-3 sobre los Rays, extendiendo su racha ganadora a siete juegos, su más larga de la temporada.
Últimamente, la tropa del mánager boricua Alex Cora no había tenido que remontar porque con frecuencia tomaban la delantera, y por un amplio margen.
Esta vez, batearon cuando más lo necesitaban, dándole una dura bienvenida al relevista de los Rays, Bryan Baker, el mismo día en que fue adquirido desde los Orioles.
Marcelo Mayer, cuyo rol a corto plazo se ha vuelto incierto con el inminente regreso de Alex Bregman desde la lista de lesionados en uno o dos días, conectó un doble impulsor al canal entre el jardín izquierdo y central para reducir la desventaja a una carrera.
Luego vino el encendido Ceddanne Rafaela, quien respondió con un sencillo de dos carreras al jardín central para darle a los Medias Rojas su primera ventaja desde la cuarta entrada.
Walker Buehler mantuvo a Boston cerca en el marcador con una apertura de calidad, limitando a los Rays a cinco imparables y tres carreras en seis entradas.
En los seis juegos anteriores, los Medias Rojas habían apaleado a dos de los peores equipos de la Liga Nacional: los Nacionales y los Rockies.
Con los Rays en la ciudad para el primero de una serie de cuatro juegos, el impulso reciente de Boston fue puesto a prueba de verdad.
Y con algo de magia en las últimas entradas, los Medias Rojas (50-45) respondieron.