BALTIMORE -- Cuando los directivos de los Mets tomaron la difícil decisión de enviar al infielder venezolano Luisángel Acuña de regreso a Triple-A Syracuse a finales de junio, indicaron que podría no estaría mucho tiempo en liga menor por mucho tiempo.
Eso es precisamente lo que sucedió. Los Mets subieron a Acuña desde Syracuse el jueves, designando para asignación al jardinero Travis Jankowski. Prevén que Acuña ocupe un rol muy similar al que tuvo la primera vez: un sustituto defensivo para las últimas entradas y corredor emergente, así como un titular ocasional, principalmente contra lanzadores zurdos. Además, Acuña le da a los Mets otra opción en el jardín central, donde jugó sus dos últimos partidos antes del ascenso.
“Sabíamos lo importante que es para este club: la versatilidad, la velocidad”, dijo el manager venezolano Carlos Mendoza. “Hay mucho potencial ahí. Fue una parte importante de este equipo los primeros dos meses”.
El ímpetu para enviar a Acuña a las menores en primer lugar fue el deseo de que tuviera turnos al bate diarios. Acuña hizo precisamente eso durante la mayor parte de tres semanas, bateando .289/.346/.378 en 53 veces al bate. Ahora que Acuña tiene más de 200 oportunidades en el plato entre dos niveles esta temporada, los directivos del equipo se sienten más cómodos de que su desarrollo no se verá obstaculizado, dado el tiempo de juego irregular que recibirá en las Mayores.
De vuelta con los Mets, se espera que Acuña juegue en la segunda y tercera base, el campo corto y el jardín central, principalmente al final de los juegos.
“Tiene muchas herramientas”, dijo Mendoza. “Sentimos que va a seguir ayudándonos aquí”.