Los ejecutivos reflexionan sobre una “muy divertida” Fecha Límite

8 de agosto de 2025

Las últimas 31 horas de cara a la Fecha Límite de Cambios la semana pasada fueron como nada visto antes.

El agitado ritmo desde las 11 a.m. del miércoles hasta las 6 p.m. del jueves – que produjo 50 canjes – mareó a todos, incluyendo a los directivos, jugadores, reporteros y aficionados. Se preguntaba cuál ficha sería la siguiente en caer.

Sin embargo, al preguntársele qué fue lo que llamó más la atención de los movimientos de la semana pasada, un ejecutivo de la Liga Americana nos sorprendió con una curva.

¿Qué sobresalió para mí?” se preguntó el directivo. “Los traspasos son difíciles de concretar”.

La gran cantidad de cambios sugiere lo contrario, pero su punto tiene sentido. En la mayoría de los casos, a ambas partes les duele realizar un canje; debes ceder talento para adquirir talento. Cuando se trata de desprenderse de un cotizado prospecto o un jugador de Grandes Ligas bajo control contractual, con frecuencia es más fácil decirlo que hacerlo.

“El triunfar tiene un verdadero precio”, indicó el directivo. “Algunos equipos y encargados de las decisiones están dispuestos a pagar el precio, y otros no”.

Varios ejecutivos señalaron al que siempre está dispuesto a pagar el precio para tratar de alcanzar el éxito: El gerente general de los Padres, A.J. Preller.

El directivo de los Frailes completó cinco cambios en la Fecha Límite que involucraron a 22 jugadores, pero ninguno superó la transacción que envió a Mason Miller a San Diego. La principal pieza que pasó a los Atléticos fue el torpedero dominicano Leo de Vries, quien es calificado por MLB Pipeline como el prospecto Nro. 3 en todo el béisbol.

“¡Preller nos pone locos a todos!” declaró un ejecutivo del Joven Circuito. “Estuvo dialogando con varios equipos ofreciendo a De Vries. Era comprador, pero operaba casi como un vendedor atendiendo la mayor oferta por De Vries”.

El infielder quisqueyano se convirtió en el primer prospecto entre los Mejores 5 en ser traspasado durante la temporada desde que MLB Pipeline comenzó sus clasificaciones en el 2004, y solamente el tercero entre los Mejores 10 Prospectos cambiados en la Fecha Límite durante ese trecho (el también dominicano Eloy Jiménez y Scott Kazmir son los otros).

“El mismo patrón se ha visto más durante los últimos años, en el que los compradores no se atreven a ceder a cotizados prospectos”, explicó un directivo de la Liga Nacional. “San Diego es la excepción, por supuesto”.

No fue hace mucho que los contendientes se desprendían de sus principales jóvenes, incluso si no estaban entre los Mejores 10 Prospectos, a cambio de piezas de ‘arriendo’ que creían que eran las últimas piezas del rompecabezas campeón.

Solamente en el 2016, los Yankees enviaron al cubano Aroldis Chapman a los Cachorros a cambio de un paquete encabezado por el venezolano Gleyber Torres. Luego, enviaron a Andrew Miller a Cleveland por cuatro jugadores, incluyendo a Clint Frazier y Justus Sheffield. Nueva York consiguió a tres prospectos entre los Mejores 100 a cambio de relevistas de ‘arriendo’ -- cada uno ayudando a sus clubes a tener un recorrido hacia la Serie Mundial.

Aparte de De Vries, los únicos entre los Mejores 100 Prospectos en ser traspasados la semana pasada fueron el panameño Eduardo Tait (Nro. 56) y Mick Abel (Nro. 91), ambos pasando de los Filis a los Mellizos a cambio del dominicano Jhoan Durán.

“Los equipos simplemente ya no se desprenden de cotizados prospectos por piezas de arriendo”, indicó un ejecutivo del Viejo Circuito, “sin importar cuánto les pueda ayudar a corto plazo”.

Por otra parte, las escuadras con jugadores bajo control contractual -- abridores específicamente -- con frecuencia fijan un precio a cambio tan exorbitante que las transacciones son casi imposible de completarse. Ése no siempre ha sido el caso; en el 2018, los Piratas adquirieron a Chris Archer -- quien estaba bajo control contractual hasta el 2019 -- por tres prospectos entre los Mejores 100: Tyler Glasnow, Austin Meadows y Shane Baz.

Entre los abridores que sobresalieron por no ser cambiados la semana pasada fueron Mitch Keller de los Piratas, Joe Ryan de los Mellizos y MacKenzie Gore de los Nacionales, más los dominicanos Sandy Alcántara y Edward Cabrera de los Marlins. Los informes indicaban que cada uno de ellos estaba disponible en el mercado de cambios.

“Los clubes vendedores no dieron marcha atrás en lo que buscaban por los abridores bajo control contractual”, explicó un directivo de la Nacional. “Por eso, creo que ninguno fue traspasado”.

Otro ejecutivo del Viejo Circuito estuvo asombrado por el gran valor del pitcheo -- tanto abridores como relevistas -- comparado con lo que pedían por jugadores de posición.

“Pienso que el pitcheo estaba en gran demanda y cada club buscaba reforzar dicho aspecto”, declaró un ejecutivo de la Liga Nacional. “Si buscabas traspasar a un jugador de posición, debías encontrar al equipo ideal con exactamente lo que necesitabas”.

“Los bates con trueno se calificaban desde diferentes puntos de vista”, indicó otro directivo del Viejo Circuito. “Ése fue un mercado muy impredecible”.

Un total de 33 relevistas fueron cambiados antes de la Fecha Límite, con Miller, Durán, David Bednar, Griffin Jax y Ryan Helsley encabezando el grupo. Helsley es el único que no está bajo control contractual durante al menos otra campaña, resultando en los compradores cediendo piezas de gran valor para reforzar sus bullpens.

“Lo que pedían a cambio de relevistas era bastante y eso se mantuvo”, dijo un ejecutivo de la Liga Nacional. “Los contendientes al final pagaron por lo que necesitaban”.

“La gran historia para mí fue la cantidad de clubes que lo apostaron todo”, expresó un ejecutivo de la Nacional. “Hay bastantes clubes que piensan que tienen la oportunidad de ganar la Serie Mundial, basado en los movimientos que realizaron -- y es evidente que varios de esos conjuntos piensan que necesitan un relevo dominante para ganar en octubre”.

Basado en la expansión del formato de postemporada, esta descabellada lucha en la Fecha Límite podría ser lo normal de ahora en adelante, con un ejecutivo del Viejo Circuito pronosticando más equipos operando en modo comprador/vendedor como lo vimos este año con Cleveland y Tampa Bay.

“La mayoría espera hasta el último minuto posible para cambiar a los jugadores”, señaló un directivo de la Nacional.

Ahora que el panorama se ha despejado, un ejecutivo repasó el agite de la semana pasada y llegó a una conclusión.

“Al final”, expresó el directivo, “definitivamente fue una de las Fechas Límite más divertidas que hemos tenido en un buen tiempo”.