TAMPA, Florida -- José Caballero sonrió y saludó con su gorra desde el escalón más alto del dugout visitante en el George M. Steinbrenner Field esta semana, regresando por primera vez como rival al hogar temporal de los Rays.
Traspasado a los Yankees el 31 de julio, el exequipo del panameño Caballero homenajeó al veloz infielder/jardinero con un breve video en la pantalla, que generó aplausos de ambas aficiones en el estadio.
Luego, Caballero les agradeció de la forma más ruidosa posible, conectando dos de los nueve jonrones de los Yankees en una paliza de 13-3. Después bromeó, diciendo que Aaron Judge y Giancarlo Stanton ya lo habían contagiado.
“Por eso somos los Bombarderos del Bronx”, exclamó Caballero. “Estar con esos muchachos… algo se te tiene que pegar”.
Quizás, pero el poder nunca ha sido la carta de presentación del istmeño. El martes firmó el primer juego de múltiples cuadrangulares en su carrera, elevando su total a 17 en tres temporadas.
La velocidad y la versatilidad definen mucho más el juego de Caballero. Con 1.78 metros y 86 kilos, Caballero lidera las Grandes Ligas con 39 bases robadas y el mánager de los Yankees, Aaron Boone, lo describe como “un jugador muy inteligente” que “juega con mucha confianza”.
“Nos aporta muchas herramientas útiles”, elogió Boone. “Su capacidad para leer el juego, para manejar el bate, su aporte en las bases... es excelente corriendo y también es muy buen defensor en cuatro o cinco posiciones distintas. Es un jugador que te ayuda a ganar”.
En 12 compromisos, Caballero -- quien fue expulsado el miércoles tras discutir un intento de robo en la segunda base-- batea para .348 (de 23-8) con los Yankees, habiendo iniciado partidos en cuatro posiciones. Boone incluso lo llamó “uno de mis jugadores favoritos”, algo que probablemente no habría dicho hace un mes.
Aunque reconoce que siempre respetó su talento desde el otro lado del diamante, Caballero tiene una bien ganada fama de ser un fastidio para los rivales, incluidos los Yankees.
En un encuentro de junio del 2023 ante los Marineros, Gerrit Cole lanzó una recta con cuenta de 0-2 que fue a dar muy por encima del backstop del Yankee Stadium, en un incidente que también generó un meme del lanzador moviendo el dedo repetidamente hacia el piloto de Seattle, Scott Servais.
Cole se molestó porque Caballero se salía del cajón de bateo repetidamente hasta que el reloj marcaba ocho segundos -- el límite para estar listo en la caja-. Eso llevó a Cole a lanzar una recta de 97 mph unos 4.5 metros por encima de su cabeza.
“No le gustó cómo estaba manipulando el reloj”, dijo Caballero entonces. “Se emocionó, y eso está bien. Las reglas están para todos y yo tenía que estar listo a los ocho segundos”.
Caballero se sorprendió con el cambio del 31 de julio, que ocurrió durante un juego entre Yankees y Rays en el Bronx. El capataz de Tampa Bay, Kevin Cash, lo tocó en el hombro para informarle de la noticia.
En los minutos siguientes, Caballero se despidió con abrazos de compañeros como Taylor Walls y Brandon Lowe, y luego empacó sus cosas para cambiarse a la cueva del lado de primera. Al final del partido, ya estaba en el clubhouse de los Yankees, listo para aprovechar su nueva oportunidad.
“Me gusta jugar duro. Me gusta competir”, aseguró Caballero. “Me gusta dar todo lo que tengo. Me gusta ganar. No importa cómo te sientas ese día, tienes que encontrar la manera de dejarlo todo en el terreno”.
Cash -- al igual que Boone -- elogió el impacto que Caballero tiene en el clubhouse.
“Lo he dicho muchas veces: Cabby hace muchas cosas que te ayudan a ganar juegos, ya sea con el guante, en las bases, o dando un hit clave de vez en cuando”, manifestó Cash. “Cuando tuvimos una buena racha, parecía que su velocidad estaba en medio de todo lo bueno que hacíamos. Le deseamos lo mejor”.
Eso sí, la próxima vez probablemente dejen el video de homenaje guardado.