¡Corre, Ramos, corre! Gigantes ganan con jonrón de oro de “Pequeñas Ligas”

28 de abril de 2025

SAN FRANCISCO -- Bob Melvin ha dirigido en las Grandes Ligas durante 22 temporadas. Nunca había visto un final como el del juego del domingo en el Oracle Park.

Por segundo día consecutivo, los Gigantes remontaron para vencer a los Rangers en la parte baja del noveno episodio por 3-2 con un jonrón de oro de “Pequeñas Ligas” del puertorriqueño contra el cerrador de Texas, Luke Jackson.

Ramos abrió la entrada con un manso rodado al lado izquierdo que fue fildeado por el propio Jackson, quien luego hizo un tiro desviado que pasó lejos del primera base Jake Burger hacia territorio foul. Ramos avanzó fácilmente a la segunda base, pero no se dio cuenta de que no había nadie en posición para respaldar a Burger y comenzó a disminuir la velocidad antes de intentar tomar la tercera.

Esa vacilación terminó funcionando a su favor, ya que obligó a Burger a hacer otro desafortunado tiro que picó más allá del antesalista Josh Smith, lo que permitió a Ramos completar su viaje alrededor de las bases y darle a los Gigantes victorias consecutivas dejando en el terreno al rival por primera vez desde el 29 y 30 de julio del 2023, contra los Medias Rojas.

“Fue literalmente una serie de eventos desafortunados”, dijo Jackson.

Después de deslizarse de cabeza en el home con la rayita del triunfo, un exhausto Ramos permaneció extendido durante varios segundos antes de que el dominicano Willy Adames y LaMonte Wade Jr. lo levantaron jalándolo por la camiseta.

“La forma en que se tiró fue bastante divertida”, comentó Wade. “No pensé que se iba a parar”.

“Simplemente una locura por todos lados”, añadió Melvin.

Ramos terminó recorriendo las bases en 18.67 segundos, registrando una velocidad de sprint promedio de 29 pies por segundo, que está por encima del promedio de las Grandes Ligas de 27 pies por segundo.

“Solo quería llegar a primera y luego, cuando vi que tiraron mal, me fui a segunda”, relató Ramos. “Honestamente, no sabía si estaban cubriendo la jugada, haciendo la asistencia o algo así. Simplemente me paré en segunda. Pensé que ya tenían la bola, y luego vi a Matt [Williams, el coach de tercera] haciéndome señas. Simplemente seguí adelante. Cuando vi que tiraron mal a tercera, simplemente seguí corriendo”.

Ramos dijo que no podía recordar la última vez que bateó un jonrón de Pequeñas Ligas, pero sabe que es probable que – al menos a corto plazo – los Gigantes lo dejen olvidar la loca carrera del domingo.

“Va a ser una locura”, aseguró Ramos. “Probablemente lo pondrán en la reunión de bateadores, solo burlándose de mí y cosas así”.

Burger dijo que no supo hasta después de la jugada que Ramos había dudado cuando llegó a segunda base, pero añadió que siempre iba a hacer ese tiro a tercera porque no quería la potencial carrera ganadora sin outs en tercera.

“Estoy tratando de ser lo más agresivo que pueda sin parecer que se me está incendiando el pelo”, dijo Burger. “Simplemente tiene que ser perfecto. No voy a poner una excusa. Si el tiro es perfecto, no estaríamos teniendo esta conversación”.

El mánager de los Rangers, Bruce Bochy, dijo que no tenía problemas con que Jackson o Burger intentaran hacer esos tiros en lugar de quedarse con la bola en la mano, y agregó que esa última jugada estaba “allí arriba” con los finales más increíbles que jamás haya visto en sus 28 años de carrera como mánager.

“Luke hace un buen pitcher, consigue un roletazo y te vas derrotado”, apuntó Bochy. “Sé que ha sucedido, pero no se ve muy a menudo. Desafortunadamente, sucedió hoy”.

Con su quinta victoria dejando en el terreno al rival esta temporada – la mayor cantidad en las Grandes Ligas – los Gigantes se llevaron dos de tres de los Rangers para mantenerse en la cima de la División Oeste de la Liga Nacional con un récord de 19-10. Jugaron para 10-7 en un tramo difícil de 17 juegos en 17 días y ahora disfrutarán de su primer día libre desde el 10 de abril el lunes, antes de comenzar una gran serie de dos juegos contra los Padres (17-11) en el Petco Park el martes.

“Poder presentarse, juegos de día, juegos de noche, viajes, Costa Este, Costa Oeste, fue bastante significativo, y estos muchachos simplemente continúan saliendo y luchando”, mencionó Melvin. “Nuestro mejor trabajo generalmente lo estamos haciendo al final de los juegos. Creo que manejaron 17 seguidos realmente bien”.

Los Gigantes anotaron su primera carrera con una base por bolas con la casa llena al venezolano Wilmer Flores por parte del abridor de los Rangers, Jack Leiter, en el primer episodio. Luego se recuperaron para empatar la pizarra en el cuarto, cuando Ramos conectó un sencillo y se robó la segunda, desde donde anotó con un sencillo de Christian Koss.

Ramos, por supuesto, terminó usando sus piernas para anotar la carrera ganadora en el noveno también, incluso si fue de la manera menos convencional posible.

“Nos mantuvimos peleando el tiempo suficiente hasta que encontramos una manera de ganar el juego”, resumió Melvin. “Es como una nueva forma de hacer el trabajo”.