ATLANTA — A menos de dos semanas de haber concluido un tramo con marca de 3-14 que incluyó su segunda racha de siete derrotas en la temporada, los Bravos barrieron a los Mets, líderes del Este de la Liga Nacional, han ganado siete de sus últimos nueve juegos y se colocaron nuevamente a solo cinco juegos del tercer y último puesto del Comodín en la Liga Nacional.
Tomó casi tres meses, pero con la victoria por 7-1 sobre los Mets este jueves por la noche en Truist Park, la barrida dio la sensación de que finalmente todo está empezando a encajar para Atlanta. Spencer Strider puso el tono desde la lomita, permitiendo solo una carrera en seis entradas, y Matt Olson dio el batazo clave con un doble de tres carreras en el sexto inning.
La rotación abridora ha sido el pilar más consistente de los Bravos durante toda la campaña, y volvió a destacarse durante esta estancia en casa de seis juegos, que comenzó con un par de triunfos ante los Rockies y concluyó con tres victorias consecutivas sobre unos Mets que se marchan de Atlanta con seis derrotas al hilo.
Hubo varias aperturas destacadas durante esta estancia en casa. Grant Holmes logró un récord personal de 15 ponches el domingo ante los Rockies, y Chris Sale se quedó a un out de un juego completo el miércoles por la noche.
Pero el desarrollo más alentador vino de la mano de Strider, quien pareció recuperar la forma por primera vez desde su cirugía en el codo del año pasado. El derecho acumuló 13 ponches contra los Rockies el sábado y luego, este jueves, navegó algunos momentos difíciles antes de retirar a 12 de los últimos 13 bateadores que enfrentó en sus seis entradas de labor.