PEORIA, Arizona -- El venezolano Ethan Salas y el dominicano Leodalis De Vries estuvieron juntos en una alineación titular de los Padres de San Diego por primera vez el domingo. Y no será la última.
Los Padres enviaron a un grupo cargado de prospectos al Camelback Ranch para enfrentar a los Dodgers la tarde del domingo y sus dos talentosos jóvenes de 18 años no tardaron en demostrar su enorme potencial. En el primer episodio, De Vries se movió hacia su derecha e hizo una jugada deslizándose (con un fuerte tiro) para robarle un hit a Mookie Betts. En la segunda, Salas conectó un doble productor contra la pared del jardín central.
“Están de visitantes, enfrentando a muchos jugadores establecidos en Grandes Ligas”, dijo el manager de los Padres, Mike Shildt, tras la derrota del domingo por 8-3. “Y simplemente encajaron. Creo que hubo muchas cosas positivas. Ambos lucieron como si pertenecieran aquí”.
Ni Salas ni De Vries son candidatos serios para ganarse un puesto en el roster del club grande esta primavera, ni probablemente en toda la temporada. Tienen apenas 18 años y juegan en dos de las posiciones más exigentes del terreno, Salas como receptor y De Vries en el campo corto.
Aun así, los Padres los ven como piezas clave para el futuro. Ambos recibirán muchas oportunidades durante la primavera y ya han causado una grata impresión, tanto en los Entrenamientos en campos alternos como entrando en los finales de los primeros juegos de la Liga del Cactus.
“Estoy feliz de que ambos estemos ahí”, dijo Salas. “Estamos demostrando de lo que somos capaces”.
Mucho se ha hablado recientemente sobre el bajón de nivel del sistema de ligas menores de los Padres. Es cierto que su profundidad se haya visto afectada en el último año tras varias transacciones importantes. Sin embargo, Salas y De Vries siempre fueron intocables en esos cambios y ahora representan la esperanza de un futuro brillante en San Diego.
De Vries fue clasificado como el prospecto número 18 en el ranking de pretemporada de MLB Pipeline, revelado el mes pasado. Salas apareció en el puesto 33. Ambos están entre los cuatro adolescentes mejor posicionados. En el grupo de firmas internacionales del 2023, Salas fue el prospecto mejor clasificado en general. De Vries ocupó ese mismo lugar en el 2024.
Jugaron juntos por primera vez cuando tenían 14 o 15 años en la República Dominicana. Ahora, sus trayectorias hacia las Grandes Ligas son similares, y es posible que comiencen la temporada como compañeros en Ligas Menores.
“[Es] emocionante”, aseguró De Vries. “Hablábamos mucho sobre esto cuando estábamos en Dominicana, sobre cómo nos sentiríamos al poder jugar juntos en las Grandes Ligas, si Dios quiere. Y ahora estamos aquí haciéndolo”.
Todavía tienen varios niveles por escalar antes de hacerlo en partidos oficiales. De Vries pasó la última temporada en Clase-A con Lake Elsinore y Salas en Clase-A Alta con Fort Wayne. Ambos enfrentaron dificultades en el plato, algo esperado para bateadores jóvenes que se miden con lanzadores mayores y con más experiencia.
Aun así, el domingo pareció ofrecer un adelanto de lo que está por venir.
“Un día emocionante para la organización”, dijo Shildt antes del juego del domingo. “Porque Leo va a jugar en el campo corto y Salas estará detrás del plato. Se lo han ganado. Se han ganado la oportunidad. Es tiempo de que estos muchachos empiecen a dar los siguientes pasos en su camino para llegar aquí de manera permanente”.