La próxima decisión de Alonso determinará su legado en Queens

4 de febrero de 2025

NUEVA YORK -- La decisión de en la agencia libre tendrá un impacto evidente en los Mets. Pero, eso es algo que ya sabíamos. Independientemente de la opinión que se tenga sobre sus exigencias salariales, es difícil afirmar que su permanencia en el roster no haría al equipo mejor.

Sin embargo, esta decisión para para Alonso va más allá de las proyecciones de PECOTA. Se trata de su legado. El dinero es una cosa. El tiempo que un jugador pasa con un equipo es otra muy distinta, sumando el peso de la historia a su elección. Si se queda, Pete tendrá una gran oportunidad de convertirse en un histórico de los Mets.

Si se va, todo cambia drásticamente.

La historia de los Mets está llena de jugadores que pasaron gran parte de sus carreras en otros equipos. El caso más representativo es el de Tom Seaver, traspasado a Cincinnati en uno de los eventos más infames en la historia del club: “La Franquicia” dejando la franquicia. Pero no fue el único. Jon Matlack jugó casi la mitad de su carrera en Texas, décadas antes de que Jacob deGrom decidiera irse a Arlington también. Keith Hernández ganó un JMV con los Cardenales. Gary Carter brindó la mayor parte de su producción a los Expos. Dwight Gooden y Darryl Strawberry se marcharon antes de cumplir 30 años, con Strawberry calificando su salida como el mayor arrepentimiento de su carrera.

“Sólo espero que no se vaya”, dijo Strawberry sobre Alonso el año pasado, “porque al final, terminé con el estómago lleno de arrepentimientos. No hay nada como jugar en Nueva York”.

No es común que un jugador llegue a la agencia libre con una plataforma como ésta. Actualmente, Alonso es tercero en la historia de la franquicia en jonrones, a sólo 26 de alcanzar a Strawberry. Si se queda en Queens, no sólo podría convertirse en el líder de todos los tiempos de los Mets en cuadrangulares, posiblemente en agosto de este año, sino que podría dejar la marca en un punto tan alto que mantendría el récord por décadas.

Alonso también es sexto en la historia de los Mets en impulsadas, 12mo en carreras anotadas, 19no en hits, 20mo en dobles, 21ro en WAR, y la lista sigue. Si se queda y se mantiene razonablemente saludable, alcanzará niveles históricos en todas esas categorías.

Independientemente de lo que ocurra, Alonso siempre será uno de los mejores Mets de su generación. Pero si firma de nuevo, tendría la oportunidad de convertirse en uno de los más grandes de cualquier época. Ésta es una franquicia con pocos ídolos entre sus jugadores de posición más allá de David Wright… y vale la pena recordar que una parte fundamental de la popularidad de Wright es el hecho de que pasó toda su carrera en Flushing. Apenas importó que sólo conectara 38 jonrones después de firmar su contrato a largo plazo.

Lo que importó fue que se quedó. Eligió Queens, rechazando la posibilidad de ganar más dinero en otro lado.

“Ser un Met de por vida significó más para mí que ser un jugador mercenario”, confesó Wright el mes pasado.

El único otro caso comparable en los Mets es Brandon Nimmo, quien tomó una decisión similar hace dos inviernos (tras probar la agencia libre). Si Nimmo continúa en su trayectoria actual, algún día tendrá su número retirado junto al de Wright en el Citi Field. En la ceremonia, no mencionarán cuánto dinero ganó.

Disculpas si esto suena a sermón. No consideres este artículo un intento de persuasión. La vida en Queens continuaría sin Alonso. Del mismo modo, Alonso es un ser humano con sus propios deseos y valores. Como dijo su compañero, el puertorriqueño Francisco Lindor, el pasado fin de semana, Alonso debe “tomar la mejor decisión para él y su familia”.

Según Lindor, Alonso debería “maximizar” su contrato, lo que parece un eufemismo para obtener la mayor cantidad de dinero posible con el poder de negociación que tiene. Pero hay otra forma de maximizarlo: Volver a unirse con una afición que lo adora.

“Sólo espero que él y la organización lleguen a un acuerdo para que se quede”, comentó Strawberry. “Déjenlo ser el jugador que ha sido. Déjenlo romper todos los récords”.

En los últimos dos años, el sentimiento de la afición hacia Alonso ha cambiado significativamente, aunque no por completo. Los recientes comentarios de Steve Cohen sobre las negociaciones han generado cierta indiferencia entre los fans. Muchos están listos para seguir adelante.

Incluso así, Alonso puede cambiar todo eso con una simple llamada, unas cuantas firmas y, sí, tragándose un poco el orgullo. Pocos jugadores tienen la oportunidad de convertirse en una parte integral de la historia de una franquicia, de ver su número retirado, de entrar al Salón de la Fama del equipo y de regresar a su antiguo hogar con el estatus de leyenda.

Firmar de nuevo con los Mets no le garantizaría todo eso, pero abriría la puerta a esas posibilidades. Definitivamente, haría más por su legado que unos cuantos millones de dólares extras.

Y sin embargo, la reunión todavía no ha ocurrido. Tal vez eso cambie en la próxima semana o dos. Tal vez no.

En Queens, la percepción sobre Alonso dependerá para siempre de la decisión que tome.