Seis conclusiones del nuevo acuerdo de Pete Alonso con Mets

7 de febrero de 2025

Lo que muchos en el béisbol sospechaban desde hace tiempo finalmente se hizo realidad el miércoles por la noche: Pete Alonso regresa a los Mets. El querido cañonero probó la agencia libre por primera vez en su carrera y, aunque exploró sus opciones en la liga, en muchos sentidos, su regreso a Queens parecía inevitable.

Sin embargo, el contrato de dos años y US$54 millones que acordó, que incluye una cláusula de salida después de la primera temporada (según fuentes), quizás no era exactamente lo que Alonso tenía en mente cuando ingresó al mercado.

Es un acuerdo importante y responde una de las últimas incógnitas de este receso de temporada. Aquí, un vistazo a seis conclusiones que surgen después del pacto.

Los Mets consiguieron lo que querían

Alonso y su agente, Scott Boras, obviamente esperaban un contrato de cuatro o cinco años. Y después del jonrón clave que Alonso conectó para vencer a los Cerveceros en la Serie del Comodín de la Liga Nacional, se podía pensar que lo conseguiría. (Especialmente cuando surgieron los rumores de que podía ir a los Azulejos hace un par de semanas).

Pero los Mets estaban conscientes de los antecedentes de otorgar contratos masivos y a largo plazo a inicialistas de poder. Esos acuerdos a menudo no terminan bien — la experiencia de los Orioles con Chris Davis es un claro ejemplo — y estaba claro que Nueva York siempre quiso limitar la duración de este contrato. Eso es exactamente lo que ocurrió.

La preocupación nunca fue por la próxima temporada o incluso la siguiente, con Alonso en sus 30-31 años. El dilema era qué tipo de jugador sería a medida que se acercara a sus mediados de los 30. Por ahora, los Mets no tienen que preocuparse por eso.

Ambas partes simplemente pospusieron la decisión

Una de las ventajas de los entrenamientos de primavera es que establece un límite de tiempo: Ambas partes tienen un fuerte incentivo para llegar a un acuerdo antes de que todos se presenten a la Florida y Arizona. Todo luce indicar que eso fue lo que sucedió aquí.

Los Mets no querían ofrecer un contrato largo, y Alonso quería maximizar sus ingresos tanto a corto como a largo plazo. Al no haber un punto de encuentro lógico entre ambas partes, decidieron aplazar la decisión. Los Mets no cedieron un acuerdo de cinco años, y Alonso aseguró una gran cantidad de dinero en el 2025 con la opción de volver a probar la agencia libre antes de la campaña del 2026.

Si este proceso te pareció agotador, tengo malas noticias: Hay una posibilidad real de que lo repitamos el próximo año.

Los Mets no tienen que apresurar a sus jóvenes

Los Mets siempre tuvieron la opción de mover a Mark Vientos a la primera base — probablemente su posición más natural — y darle la antesala a Brett Baty o al venezolano Luisángel Acuña para ver si podían consolidarse como jugadores regulares en Grandes Ligas. Pero, ¿por qué ponerse en esa situación si no es necesario, especialmente en una división tan competitiva?

Retener a Alonso por al menos un año (o dos, dependiendo de la cláusula de salida) les da a los Mets la libertad de permitir que esos jugadores se desarrollen sin la presión inmediata de rendir en un equipo que buscará ganar la Serie Mundial en el 2025, y en cada temporada posterior a ésa.

¿Podrían Baty o Acuña (o el dominicano Ronny Mauricio, o cualquier otro prospecto de los Mets) asumir la tercera base —o la inicial — en algún momento? Tal vez. Pero hay demasiado en juego en el 2025 para contar con ello. Traer de vuelta a Alonso significa que no tienen que apresurar ese proceso.

El estatus de Alonso como un histórico de los Mets está asegurado

Alonso podría jugar un solo año más con los Mets, pero eso debería ser suficiente para consolidar un hecho fundamental: Es una leyenda de los Mets. Con 226 jonrones en su carrera, si logra conectar 27 este año — y, ¿alguien realmente duda que lo hará? — superará a David Wright (242) y luego a Darryl Strawberry (252) para convertirse en el líder histórico de cuadrangulares del club. (El único jugador que podrías imaginar superándolo en las próximas dos décadas: El dominicano Juan Soto, quien actualmente tiene cero).

Si Alonso suma sólo 70 impulsadas más, alcanzará las 656, superando a Ed Kranepool, Howard Johnson y Mike Piazza para ubicarse tercero en la lista de los Mets, únicamente por detrás de Strawberry (733) y Wright (970).

Ser el líder histórico de vuelacercas de una franquicia es algo especial. Que Alonso lo haya logrado con tanta pasión por los Mets y sus fans lo hace aun más significativo.

La competencia por la División Este de la Liga Nacional será una locura

Los Filis fueron geniales el año pasado y tienen un grupo de veteranos decididos a ganar una Serie Mundial antes de que el tiempo los alcance. Los Bravos llegaron a los playoffs a pesar de una plaga histórica de lesiones y, con la mayoría de sus estrellas de regreso en plena forma poco después del inicio de la temporada, podrían volver a ser el equipo dominante que fueron antes.

Y ahora los Mets han asegurado a una de sus piezas clave y mantienen intacta la base de su equipo. ¿Es posible que tres de los cinco o seis mejores equipos de MLB estén en la División Este de la Liga Nacional en el 2025? Todo apunta a que sí. Esta carrera será apasionante de principio a fin. No vemos la hora de presenciarla.

Los Azulejos necesitan resolver la situación de Vladdy… y pronto

Nunca tuvo mucho sentido que los Azulejos firmaran a Alonso, pese a los insistentes rumores de hace un par de semanas. Aún tienen al dominicano Vladimir Guerrero Jr. en su roster para el 2025, lo que habría sido una combinación extraña por un año. Y si le hubieran dado a Alonso el contrato a largo plazo que probablemente se requería para llevarlo a Toronto, eso habría complicado incluso más una posible extensión para Vlad Jr.

Ahora, ese obstáculo ya no existe. Este equipo ha estado activo en el receso de temporada, pero no parece que los Azulejos estén apostando todo al 2025 como se pensaba. Eso hace que asegurar a Vladdy sea más importante que nunca. No habrá muchas opciones para reemplazarlo. Y, si acaso, el contrato relativamente modesto de Alonso podría darles un punto de referencia en las negociaciones.