SAN DIEGO – El béisbol no es sólo un deporte, sino un estilo de vida para la familia Mesa.
El padre de Víctor Mesa Jr., prospecto Nro. 26 de los Marlins, Víctor, fue una leyenda en Cuba. Su hermano mayor, Víctor Víctor, fue el principal prospecto internacional del grupo del 2018.
Mesa Jr., quien comenzó a jugar béisbol a los 5 años, desertó a los 16 junto con Víctor Víctor en mayo del 2018. Seguiría a su hermano al firmar con la organización de los Marlins ese octubre, recibiendo ambos US$6.25 millones combinados (US$5.25 para Víctor Víctor, US$1 millón para Mesa). Pero Víctor Víctor nunca pasó de Triple-A.
Y cinco años después, la invitación del hermano menor al Gran Show finalmente llegó.
“Desde que era pequeño [lo supe]”, comentó Mesa Sr. “Su bate siempre fue especial. Siempre pudo jugar defensa y es muy, muy inteligente cuando se trata de béisbol”.
Tras ser subido de Triple-A Jacksonville el lunes, Mesa entró como sustituto defensivo en el jardín central y más adelante se ponchó en su debut en Grandes Ligas. El día siguiente, en su primer partido como titular en MLB -- en la derrota de los Marlins 8-6 el martes ante los Padres en el Petco Park -- Mesa conectó su primer hit, un sencillo productor, durante un primer inning de seis anotaciones para el club.
“En ese momento, yo era la persona más contento del mundo”, señaló Mesa.
Esta oportunidad nunca se le presentó al patriarca de la familia, quien fue considerado el equivalente a Rickey Henderson en Cuba, así que Mesa Jr. está cumpliendo el sueño de toda la familia. Cuando conectó un sinker hacia el lado derecho del infield para el imparable histórico, se les podía escuchar celebrando detrás del dugout de los Marlins.
“Digo que mis victorias son sus victorias”, dijo Mesa. “Contento por eso y por estar aquí; ésta es mi vida, y cada día es un sueño aquí”.
Eso es porque se necesitó de todos ellos para hacer de esto una realidad. Desde niño, Mesa aprendió de su padre y su tío. Hoy en día, Mesa Sr. observa casi todos los entrenamientos de su hijo, pero trata de dar un paso atrás en cuanto a la instrucción.
“Lo único que siempre le digo es que sea disciplinado, que va a ser un gran pelotero”, dijo Mesa Sr. “Que lo tome día a día, que las cosas van a llegar cuando se supone que lleguen”.
Palabras sabias, considerando la ruta tortuosa de Mesa, de 23 años, hacia las Mayores.
Mesa probablemente habría debutado en el 2024, después de que Jazz Chisholm Jr. fue cambiado, pero el cubano sufrió una lesión en la espalda que puso fin a su temporada en Triple-A Jacksonville. Esta primavera, Mesa sufrió una distensión en el isquiotibial derecho antes de que comenzara la acción de la Liga de la Toronja, y luego se lesionó la corva izquierda mientras se rehabilitaba. No fue hasta recientemente cuando regresó a la acción.
Después de 10 encuentros de rehabilitación con Clase-A Jupiter, Mesa fue transferido a Triple-A, donde bateó .300/.375/.650 con cuatro anotadas, dos dobles, un triple, un jonrón, cinco empujadas, tres bases por bolas y tres ponches en seis encuentros.
El equipo de Triple-A de Jacksonville sustituyó a Mesa por un emergente en la séptima entrada y le informaron del llamado. No fue sino hasta que hizo una videollamada con su familia que empezó a asimilarlo y las lágrimas fluyeron.
“No podía creerlo”, recordó Mesa. “Uno lo imagina de muchas maneras diferentes, pero nunca va a ser como uno piensa y creo que fue genial. Es especial. Sé que tengo el talento, o siento que tengo el talento para estar aquí. Es más por todo lo que pasé a lo largo de los años, todas las lesiones, todos los malos y buenos momentos”.
Los Marlins ascendieron a Mesa porque el patrullero Derek Hill se agravó la muñeca izquierda en una atrapada de clavado en el octavo episodio el domingo, similar a la que hizo el 8 de abril en Nueva York y que lo dejó fuera por tres semanas.
Ya sin los nervios después del debut del lunes, Mesa inició el encuentro en el jardín central y bateó como octavo en el orden el martes.
“Víctor es un atleta estupendo, muy explosivo”, dijo el manager de los Marlins, Clayton McCullough. “Tiene la habilidad de ir al bosque central, pero es capaz de jugar en los jardines, batear desde el lado izquierdo y brindarnos algo de atletismo. Incluso en el poco tiempo que lo conozco, [es] una persona estupenda, un gran compañero”.