Con 18 años recién cumplidos, Made ya se hace un nombre en Milwaukee

12 de julio de 2025

ATLANTA – No es de lo más común ver a un joven de 17 años empezar una temporada en Clase-A. No es de lo más común ver a un prospecto firmar con un equipo de Grandes Ligas y estar en el Juego de las Futuras Estrellas al año siguiente. Y en ese tenor, tampoco es muy común ver a una promesa internacional en su primer año en los Estados Unidos ser convocado a dicho evento.

ha hecho todo eso en el 2025. El infielder dominicano, prospecto número 1 de los Cerveceros y el número 8 en la lista general de MLB Pipeline, viene dando de qué hablar como el jugador más joven al inicio de la campaña en la Liga de Carolina con Clase-A Carolina Mudcats, del sistema de Milwaukee.

Con línea de .268/.377/.395 (OPS de .772), 17 dobles, tres triples, cuatro jonrones, 41 empujadas y 38 bases robadas en 71 partidos del 2025, Made – quien saltó el nivel de novatos en los Estados Unidos – está dejando huella en Clase-A, habiendo cumplido los 18 años de edad hace apenas dos meses.

Ahora, convocado al Juego de las Futuras Estrellas del sábado en el Truist Park de Atlanta, el oriundo de San Cristóbal, R.D. disfruta el momento.

“Contento”, dijo el torpedero, quien también ha jugado ocasionalmente en la tercera almohadilla y la segunda base. “Mi familia está aquí. Están los que me rodean. Dándole gracias a Dios por esta oportunidad y esta bendición que Él me ha dado”.

Made arrasó en su primera temporada profesional en el 2024 en la la Dominican Summer League, donde bateó .331/.458/.554 (OPS de 1.013) con 28 bases robadas en apenas 51 juegos. Allí, sobresalió por su disciplina en el plato, con una tasa de apenas el 15% de swings a pitcheos fuera de la zona de strikes y una tasa de contacto del 89%.

Este año, esa paciencia ha resultado en ese porcentaje de embasarse de .377, el undécimo mejor en la Liga de Carolina.

“Mi meta siempre ha sido saber jugar mi pelota cada día, aprender más del juego y seguir haciendo mi trabajo”, expresó Made sobre su hasta ahora exitosa transición al béisbol en los Estados Unidos y al nivel de Clase-A, lo cual incluye 38 bases por bolas, la quinta mayor cantidad en la Liga de Carolina este año.

El premio es poder exhibir su talento en lo que hasta ahora ha sido el mayor escenario para él, el Juego de las Futuras Estrellas entre algunos de los prospectos más cotizados del béisbol en este momento.

“Va a ser algo bonito, una experiencia bonita”, dijo Made sobre jugar el sábado en el Truist Park, sede de los Bravos. “Muchas ganas tengo de jugar y pisar un estadio de Grandes Ligas”.

Los Cerveceros han sido bien agresivos en el mercado internacional en los últimos años, algo evidenciado por el ascenso meteórico del joven venezolano Jackson Chourio. Milwaukee espera que Made, con el tiempo, pueda seguirle los pasos a Chourio, quien fichó por ocho temporadas y US$82 millones hace un par de años tras arrasar en liga menor y antes de ser parte íntegra ahora – aunque con algunas cosas que pulir aún – de una escuadra que lucha una vez más por la clasificación en la Liga Nacional.

“Me siento bien”, dijo Made al ponérsele el tema del peso de las expectativas. “Y para mí esto es no es responsabilidad. Esto es un logro, esto es una bendición”.