NUEVA YORK -- El piloto de los Marineros, Dan Wilson, jugó con Ken Griffey Jr. durante seis años en Seattle en la década de los 90. Griffey era la figura en la Ciudad Esmeralda, un jugador completo que lo hacía todo, desde jonrones majestuosos hasta atrapadas acrobáticas en el jardín central.
Uno de los récords de franquicia que Griffey mantuvo durante 26 años era el de más jonrones (35) antes del Juego de Estrellas. Wilson pensó que esa marca jamás sería superada.
“Uno ni piensa en eso por la forma en que [Griffey] podía batear cuadrangulares”, destacó Wilson.
Pero los récords están hechos para romperse, y el receptor Cal Raleigh dejó su huella durante la derrota de los Marineros por 10-3 ante los Yankees la noche del martes en el Yankee Stadium. Raleigh conectó su 36to jonrón de la temporada en el octavo inning ante el derecho Geoff Hartlieb, rompiendo el récord impuesto por Griffey en 1998.
“Obviamente no fue el resultado que queríamos esta noche”, lamentó Raleigh sobre la derrota. “Es frustrante, pero [el récord] es algo especial de lograr. [Griffey] es un gran jugador y yo trato de hacer mi parte”.
Seattle estaba abajo 10-1 en la parte alta del octavo episodio cuando Raleigh, en cuenta de 1-1, mandó la pelota al segundo nivel del jardín derecho. Sus 36 bambinazos son la mayor cantidad en Grandes Ligas, dos más que Aaron Judge, quien conectó su 34to jonrón en el séptimo inning ante el relevista Casey Legumina.
Raleigh está teniendo la mejor temporada de su carrera. Además de liderar las Mayores en batazos de cuatro esquinas, encabeza la Liga Americana en impulsadas (76) y presenta una línea ofensiva de .268/.383/.646. Está dándole competencia a Judge en la carrera por el JMV de la Liga Americana.
¿Qué ha cambiado este año para Raleigh?
Siempre ha tenido capacidad para responder en los momentos claves --basta recordar su jonrón para sellar el pase a los playoffs en 2022--, pero nunca había sido un bateador consistente. Ahora, encuentra buenos conteos, recibe buenos lanzamientos y no los desaprovecha.
“Estoy tratando de mejorar, de crecer como jugador”, comentó Raleigh. “Trato de entender quién soy como bateador. Es algo que me propuse desde ambos lados del plato. Busco ser un bateador más completo. Trato de aprovechar mis turnos cuando se presentan. No busco solamente el poder”.