¿Barrida sincronizada? Los Filis anotaron dos carreras… ¡en 0.31 segundos!

21 de junio de 2025

FILADELFIA -- nunca le gritó a mientras la dupla se lanzaba hacia el plato al unísono con una barrida casi perfecta, pero el receptor de los Filis ciertamente lo estaba pensando.

“Doblando por la tercera base, en mi cabeza, yo estaba como, ‘O nos van a poner out a los dos o vamos a estar los dos quietos’”, expresó Realmuto después de la victoria por 10-2 de los Filis sobre los Mets la noche del viernes en el Citizens Bank Park.

El receptor de los Mets, el venezolano Luis Torrens, fildeó el tiro de relevo y se lanzó para tocar a uno y/o a ambos jugadores. Castellanos golpeó el plato. Realmuto lo tocó justo después. El umpire principal señaló quieto… y luego inmediatamente volvió a señalar quieto.

“Por suerte, ambos nos metimos”, dijo Realmuto.

Las barridas sincronizadas del dúo se produjeron tras un doble de Bryson Stott que limpió las bases y abrió el juego en la parte baja de la séptima entrada. Con los Filis ya habiendo anotado tres carreras en el episodio para tomar una ventaja de 5-2, Stott conectó un batazo profundo al jardín izquierdo-central con Alec Bohm en tercera, Castellanos en segunda y Realmuto en primera.

Bohm anotó fácilmente. Castellanos se mantuvo cerca de la intermedia por si la bola se quedaba en el aire el tiempo suficiente para ser atrapada. Realmuto hizo una buena lectura y ya estaba casi en segunda base antes de que Castellanos saliera disparado hacia tercera.

Realmuto tenía una sonrisa en su rostro durante toda la jugada.

“No pude evitarlo”, indicó. “Creo que estuve sonriendo todo el tiempo. Como dije, es una de esas jugadas para las que nunca te preparas realmente, así que fue divertido ser parte de ella”.

Considera esto: Realmuto tocó el plato 12.19 segundos después de que la bola saliera del bate de Stott, según Statcast. Castellanos lo hizo en 11.88 segundos, una diferencia de 0.31.

En cuanto a los últimos 90 pies, Castellanos fue de tercera a home en 3.39 segundos, mientras que Realmuto lo hizo en 3.35 segundos. Los dos estaban tan cerca que fue imposible para el coach de tercera base Dusty Wathan decirle a uno que fuera y a otro que parara.

“Si él pensó que Casty iba a estar quieto”, señaló Realmuto, “siento que yo probablemente también iba a estarlo”.

Castellanos, por su parte, sabía que Realmuto estaba cerca, pero él, obviamente, tenía la peor vista de cuán cerca. Una vez que Castellanos vio la repetición, se dio cuenta de que había visto una jugada así antes… en algún lugar.

“Parece, ¿cómo se llama?, ‘Novato del Año’”, indicó Castellanos, haciendo referencia a la película de comedia de béisbol de 1993.

Un reportero dijo que podría ser “Major League”.

“No recuerdo cuál”, dijo Castellanos, “pero sé que es una de esas películas de béisbol. Es una escena divertida”.

Resulta que también es divertido en la vida real.

“Todos nos estábamos riendo aquí adentro”, agregó Zack Wheeler, quien vio la jugada por televisión mientras recibía su tratamiento post-juego después de lanzar cinco entradas en blanco. “Simplemente me alegro de que todo saliera bien”.

“Se sintió como jugar un partido de Pequeñas Ligas”, dijo Realmuto. “Incluso al regresar al dugout, todo el mundo se reía y se divertía con ello. Era simplemente un escenario diferente al que sueles tener en un juego, así que poder divertirse y reírse en el dugout, fue un momento especial”.

Ese fue sin duda el momento destacado del primer encuentro de una serie de tres juegos muy esperada entre un par de rivales que llegaron a la noche empatados en la cima del Este de la Liga Nacional. Entre la séptima entrada de seis carreras y el jonrón de dos anotaciones de Castellanos en la octava, los Filis (46-30) convirtieron un partido reñido en una paliza para superar a los Mets (45-31) por primera vez desde el 30 de mayo.

“Solo quería tocar el plato y quitarme de su camino”, dijo Castellanos.

¿Y Realmuto realmente nunca le dijo que se apurara en ningún momento durante esos frenéticos 12 segundos?

“No creo que haya gritado”, culminó Realmuto.

Después de una pausa, añadió con una sonrisa: “Pero definitivamente lo estaba pensando”.