WASHINGTON -- Brandon Nimmo no había tenido el mejor comienzo de año antes del juego del lunes. Había estado haciendo buen contacto y golpeando bolas con fuerza, pero no estaban cayendo de hit.
El manager venezolano Carlos Mendoza habló sobre ello antes del encuentro, diciendo: “Lo superará. Está luchando contra eso ahora, y es un buen bateador”.
Bueno, se puede decir que Nimmo parece haber superado los problemas, luego de explotar a lo grande en la victoria de los Mets por 19-5 sobre los Nacionales para dividir la serie de cuatro juegos en el Nationals Park, yéndose de 6-4 con dos jonrones y nueve carreras impulsadas para empatar al puertorriqueño Carlos Delgado (27 de junio del 2008, contra los Yankees) con el récord de la franquicia de más empujadas en un solo partido.
“Empezamos a ver al Nimmo que todos conocemos”, comentó Mendoza después del compromiso. “Es muy buen jugador, y fue bueno verlo salir ahí y tener ese tipo de jornada”.
No sólo fue un encuentro que sirve para lograr un récord de franquicia, sino también algo hecho muy raramente en Major League Baseball.
Nimmo se convirtió en el primer jugador en MLB desde Shohei Ohtani de los Dodgers el 19 de septiembre del 2024, en registrar al menos nueve carreras impulsadas. También es el tercer jugador desde que las empujadas se hicieron oficiales (1920) en acumular nueve o más en un lapso de tres innings (del sexto al octavo), uniéndose al dominicano Sammy Sosa de los Cachorros en Colorado el 10 de agosto del 2002 (innings tres al cinco) y el boricua Iván Rodríguez de los Rangers en Seattle el 13 de abril de 1999 (del uno al tres), según Elias Sports Bureau.
Nimmo es también apenas el segundo jugador con nueve o más impulsadas en un encuentro a partir del sexto inning en adelante desde que las remolcadas se hicieron oficiales (1920), uniéndose a Mike Moustakas (también nueve) el 12 de septiembre del 2015, según Elias.
A nivel más personal, fue el primer encuentro de por vida para Nimmo con múltiples jonrones de más de una carrera, después de que conectó un cuadrangular de tres carreras en el sexto y un grand slam en la séptimo entrada para el séptimo juego de dos o más bambinazos de su carrera.
“Tienes una idea”, dijo Nimmo. “Definitivamente hay una parte de ti que lleva la cuenta, especialmente cuando [el coach de primera base Antoan Richardson] se acercó después del doble -- la última vez que me embasé -- y dijo: ‘Bueno, nueve empujadas, eso tiene que ser una marca personal, ¿verdad?’ Yo dije: ‘Sí, definitivamente lo es’. … Creo que antes de esto, mi tope era como cinco, y ese también fue un día increíble”.
Por supuesto, Nimmo no tenía idea de la magnitud completa de su logro hasta después del compromiso.
“Me lo dijeron justo después del partido”, dijo Nimmo. “Y no tenía ni idea. … Estaba pensando: ‘Oh, hombre, sería realmente genial conseguir doble dígito de impulsadas en un día’, cuando venía a batear antes de que Swaggy [Mark Vientos] conectara el cuadrangular de tres rayitas. Y pensé: ‘Oh, hombre, sí, esto sería dulce si pudiera conseguir un par más’”.
Fue precisamente Vientos quien detuvo los sueños de Nimmo de un juego de 10 o más remolcadas, conectando un bambinazo de tres carreras en el noveno inning antes de que Nimmo fuera al plato. Y, mientras Vientos trotaba por las bases y Nimmo se preparaba para ir al plato, estaba sonriendo -- sabiendo que tendría que conformarse con sólo nueve, quizás 10 si podía conectar otro jonrón (no lo hizo).
“Ha sido un poco frustrante”, dijo Nimmo. “Y nunca sabes, días como hoy pueden suceder -- obviamente, empatar un récord de franquicia en empujadas, eso obviamente no sucede todos los días. Pero incluso sólo poner bolas en el aire, golpear bolas con fuerza -- no siempre funciona así. Así que realmente disfruté hoy”.
“… Éstos días no ocurren tan a menudo, y simplemente, te relajas y lo disfrutas”.