PHOENIX -- El cañonero cubano de los Astros, Yordan Álvarez, dio otro pequeño paso el lunes en su regreso de una fractura en un hueso de la mano derecha cuando bateó ante algunos tiros suaves en la jaula, además de conectar pelotas de un tee, algo que viene haciendo durante unos días. El veterano afirmó que está haciendo swings a una intensidad del 60-65 por ciento y que no hay un cronograma para su regreso.
Álvarez, quien ha estado fuera desde el 2 de mayo y tuvo un contratiempo en su rehabilitación a principios de julio, dijo que su mano se está “sintiendo muy bien” y que está “avanzando en la dirección correcta”. Aun así, los Astros están tomando el camino largo y conservador con respecto a la lesión en la mano de Álvarez, con la esperanza de que no vuelva a ocurrir cuando regrese.
“Estamos tratando de ser cuidadosos con todo esto, tratando de llevarlo al mejor punto y luego sabremos cuándo puedo volver”, indicó Álvarez antes del primer partido de la serie de Houston contra los D-backs en el Chase Field.
Álvarez es uno de los 16 jugadores en la lista de lesionados de los Astros, incluyendo a cinco que estuvieron en la alineación del Día Inaugural. El antesalista mexicano Isaac Paredes fue inhabilitado el sábado, después de sufrir una distensión en el tendón de la corva derecha corriendo hacia la inicial la noche anterior en Seattle.
El torpedero dominicano Jeremy Peña, quien sufrió una fractura en una costilla cuando fue golpeado por un lanzamiento el 27 de junio, está "muy cerca" de enfrentar a lanzadores en vivo en los próximos días en la Florida, explicó el manager del equipo, el boricua Joe Espada. Si no hay contratiempos, regresará antes que Álvarez.
“No es un secreto que he estado fuera por más de un par de meses, pero queremos hacer todo sin apuro”, continuó Álvarez. “Es una situación delicada con la mano. Ha sido frustrante, pero estamos siendo inteligentes con esto y lo estamos llevando al punto de que estamos progresando y ésa es la parte más importante. Eso es lo que me va a ayudar a volver y jugar”.
Álvarez recibió dos inyecciones en la mano el 2 de julio para ayudar a reducir la inflamación y mencionó que la mano respondió bien a ellas. El equipo dijo que Álvarez ha recibido inyecciones en la mano anteriormente mientras ha estado en la lista de lesionados esta temporada. Álvarez dijo que operarse no es una opción.
“Necesito descansarla”, expresó. “Necesito volver y jugar y creo que voy en la dirección correcta ahora mismo para volver y jugar”.
Álvarez realizó prácticas de bateo en el terreno el 28 de junio en el Daikin Park y se reportó a West Palm Beach, Florida, el 29 de junio para intensificar su rehabilitación con prácticas de bateo en vivo. Hizo algunos swings sin bola el 30 de junio y se reportó a las instalaciones el 1ro de julio con más dolor en la mano, lo que provocó la visita a un especialista.
Álvarez agregó que en un principio, se lastimó la mano haciendo swing en un juego a finales de abril, pero siguió jugando con el dolor porque ha lidiado con inconvenientes similares en el pasado. Fue retirado de la alineación de los Astros antes del partido del 3 de mayo contra los Medias Blancas en Chicago y pasó a la lista de lesionados de 10 días el 5 de mayo (fue transferido a la de 60 días el miércoles).
Álvarez fue diagnosticado originalmente con una distensión muscular en la mano derecha tras una resonancia magnética el 6 de mayo. La hinchazón y la inflamación en la mano impidieron que el equipo viera lo que resultó ser una fractura del cuarto metacarpiano. Houston anunció el 31 de mayo que Álvarez tenía una fractura que estaba sanada en un 60%, calificándola de “pequeña fractura”.
La lesión jugó un papel en la línea de bateo del toletero de .210/.306/.340 y apenas tres cuadrangulares y 18 carreras impulsadas en 121 veces al bate. Los Astros siguen liderando el Oeste de la Liga Americana sin Álvarez; el club todavía espera poder contar con él para la recta final de la temporada.