Reales y Orioles empatan marca con 10 HR solitarios en Camden Yards
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Cuando escuchas “11 jonrones entre los dos equipos”, seguramente te imaginas un festival de carreras, ¿verdad?
Te sorprenderías.
Los Orioles y los Reales se enfrentaron en Baltimore este fin de semana para una revancha de la Serie de Comodines y cada uno se apuntó una blanqueada en los primeros dos juegos de la serie, los Orioles ganando el viernes por 3-0 y los Reales asegurando una victoria de 4-0 el sábado. Luego se conectaron 11 vuelacercas el domingo en una victoria de Kansas City por 11-6, un marcador relativamente bajo porque de esos 11 cuadrangulares, 10 se conectaron con las bases vacías.
Sí, eso es un récord. Los Orioles y los Reales empataron la marca de Grandes Ligas de más jonrones solitarios en un solo juego, igualando a los Medias Blancas y los Tigres el 28 de mayo de 1995 en el Tiger Stadium y a los D-backs y los Cachorros el 20 de mayo del 2022 en el Wrigley Field.
Durante gran parte del juego, otro récord también estuvo muy presente: el total más alto combinado de jonrones para un juego en el que solo se conectaron bambinazos solitarios es ocho, por los Marineros y los Padres el 24 de junio del 2006, y los Rockies y los Marlins el 20 de junio del 2016. Desafortunadamente para los fanáticos de las rarezas del béisbol, el undécimo y último vuelacercas de la tarde, conectado por Michael Massey de los Reales en la parte alta de la novena, fue un batazo de dos carreras.
El venezolano Maikel García de los Reales y Jackson Holliday de Baltimore pegaron dos cuadrangulares solitarios cada uno, mientras que Jonathan India, Bobby Witt Jr., Vinnie Pasquantino, Luke Maile, Cedric Mullins y Ryan O'Hearn se combinaron para los otros seis.
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Obviamente, es una rareza estadística, pero las estrellas se alinearon aquí. Los Reales, que dieron siete jonrones en la tarde para establecer un récord de franquicia en un solo juego, llegaron al juego en el último lugar en las Mayores con 18 bambinazos, de los cuales 14 (77.8%) fueron batazos solitarios, la proporción más alta en las Mayores. Los Orioles, aunque lidiando con problemas mucho mayores del lado del pitcheo, también llegaron a la acción del domingo anotando muy por debajo de cuatro carreras por juego y rezagados particularmente en el porcentaje de embasarse (.295, 25tos. en MLB).