Misiorowski inicia su carrera con 11 innings seguidos sin hits; un récord en la Era Moderna
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MINNEAPOLIS -- Jacob Misiorowski causó un gran impacto en su debut en Grandes Ligas. Su segunda presentación el viernes fue aun más memorable.
En una de las mejores secuelas desde “El Padrino Parte II”, Misiorowski lanzó seis entradas perfectas antes de permitir finalmente su primer hit y carrera como grandeliga en la victoria de los Cerveceros por 17-6 sobre los Mellizos en el Target Field. Una base por bolas a Byron Buxton y el jonrón de dos carreras de Matt Wallner en la séptima entrada fueron los únicos errores en la joya de pitcheo de Misiorowski.
El derecho de 23 años y prospecto Nro. 4 de los Cerveceros deslumbró en su primera salida con Milwaukee, lanzando cinco entradas sin hits contra los Cardenales el 12 de junio. Su segunda apertura en Chicago contra los Cachorros fue suspendida por lluvia el miércoles, pero el descanso adicional no lo inmutó.
“Me sentí más tranquilo y listo para salir en comparación con la primera”, comentó Misiorowski. “Los nervios eran bastante intensos en la primera, así que es bueno finalmente sentirme asentado”.
Misiorowski ponchó a seis y otorgó un boleto en más de seis episodios contra los Mellizos. La racha de 11 innings sin hits para iniciar una carrera es la más larga por un lanzador exclusivamente abridor en la Era Moderna (desde 1900), según Elias Sports Bureau.
Mientras Misiorowski lanzó 29 rectas que alcanzaron las 100 millas por hora, utilizó todo su arsenal para desconcertar a los Mellizos. Sólo en la primera entrada, abanicó a Wallner con una curva de 88 mph, y luego el dominicano Willi Castro se atornilló en el suelo al poncharse con un slider de 95.5 mph.
“Creo que su slider fue obviamente duro. Estaba dominando con eso”, explicó Castro. “No ves a un tipo lanzando un slider a 95, 96. Es muy difícil de detectar. Pero sí, bien por él”.
Misiorowski consiguió sus siguientes tres ponches con su recta de cuatro costuras, que alcanzó un máximo de 102.1 mph el viernes. Y para rematar, su último abanicado llegó cuando Kody Clemens no pudo contener su swing en un cambio de 94.4 mph.
“Creo que simplemente tuvo un día excelente en el montículo”, dijo el manager de los Mellizos, Rocco Baldelli. “Se metió en la zona cuando lo necesitaba al principio, y luego pudo lanzar… Mira, el repertorio es bueno. Es muy bueno, y pudo poner la bola donde quiso hoy”.