¿Cómo ayudará el regreso de Kike en el punto más débil de Dodgers?

LOS ÁNGELES -- Durante los últimos dos meses, las lesiones han mermado la profundidad de jugadores de posición de los Dodgers. Sin embargo, el lunes recuperaron al primero de varios de ellos, cuando el utility puertorriqueño Enrique “Kike” Hernández fue activado antes del primer encuentro de la serie contra los Rojos.

Hernández había estado en la lista de lesionados de 10 días desde el 7 de julio por una inflamación en el codo izquierdo. Antes de eso, había estado jugando lesionado por más de un mes.

"Jugué hasta que, básicamente, sentí que ya no podía ni sostener el bate", explicó Hernández. "Y, la verdad, fue algo tonto de mi parte. Pero siempre he sentido que si creo que puedo jugar, no voy a entrar en la lista de lesionados. Para cuando fuimos a hacernos la resonancia magnética, ya era un poco tarde".

El infielder Buddy Kennedy fue designado para asignación como el movimiento correspondiente.

Antes de quedar fuera de acción, el versátil Hernández vio la mayor parte de su tiempo de juego en el cuadro interior. Pero dada la situación actual del roster de los Dodgers, podrían necesitarlo más en los jardines en la recta final.

La semana pasada, los problemas defensivos del dominicano Teóscar Hernández provocaron una conversación sobre si los Dodgers necesitan hacer cambios en el bosque derecho. Por el momento, no hay planes de hacer eso. Pero la pregunta más importante en cuanto a la configuración de los jardines podría ser cómo sacar el máximo provecho ofensivo de los patrulleros izquierdos del equipo.

Al comenzar el lunes, los guardabosques izquierdos del equipo se combinaban para el segundo OPS más bajo (.661) de los grupos de posición del equipo, sólo por encima de los intermedistas (.653).

Michael Conforto ha sido el jardinero izquierdo principal de los Dodgers. Aunque tuvo su mejor mes ofensivo en julio, agosto se perfila como su peor mes en una campaña que en general ha sido difícil para él en el plato.

De cara al futuro, el manager Dave Roberts dijo que ve la situación del bosque izquierdo como abierta. Algunas alternativas incluyen a Alex Call y a Kike. Curiosamente, Hyeseong Kim inició el primer juego de su asignación de rehabilitación con Triple-A Oklahoma City en esa posición, que defendió esporádicamente en sus tiempos en la KBO.

Kike, quien normalmene saca lo mejor de sí cuando los partidos son más importantes, podría ser una gran adición mientras los Dodgers luchan por el título del Oeste de la Liga Nacional en el último mes de la temporada.

"Kike es una especie de comodín, en el sentido de que no ha tenido el año que esperaba hasta este punto", expresó Roberts. "Las últimas semanas, estuvo lesionado. Pero es un muchacho que pusimos a jugar todos los días en la postemporada".

Durante aproximadamente el primer mes de su paso por la lista de lesionados, Hernández no progresó mucho. Terminó recibiendo cuatro inyecciones en el codo en ese lapso. Las primeras tres — cortisona, plasma rico en plaquetas (PRP) e hidrodisección con células madre — no hicieron mucho.

Cuatro días después de recibir una cuarta inyección — otra de cortisona — Hernández por fin se sintió mejor. Si no hubiera funcionado, podría haber necesitado de una cirugía que hubiese terminado con su temporada.

"Casi lloro en la mañana, porque fue la primera mañana que desperté sin dolor", confesó. "Fue un par de días después de eso; empecé a hacer swings hace dos semanas, para ser exacto, un lunes. Ha sido una rápida puesta a punto".

Hernández bateaba .195 con OPS de .626 cuando fue inhabilitado. No es una garantía de que represente una mejora ofensiva en el jardín izquierdo, pero sus números cayeron después de que se lesionó el codo con un deslizamiento incómodo en la última semana de mayo.

"No he sido el bateador más prolífico del mundo, pero tampoco soy un bateador de menos de .100 por un mes", aseguró Hernández. "Se volvió muy desafiante. Llegó al punto en que sentía que no podía alcanzar la recta. Y luego, cuando hacía los ajustes correctos para poder alcanzarla, no podía ajustarme a los pitcheos rompientes".

En cinco juegos de rehabilitación con Oklahoma City, Hernández se fue de 14-5 (.357) con un par de dobles y tres carreras remolcadas. Defensivamente, jugó en la antesala, el jardín izquierdo y el central.

Mientras realizaba su trabajo previo al partido el lunes, Hernández usó una manga sobre el codo izquierdo, la cual utilizó en todos los juegos excepto uno durante su asignación de rehabilitación. Se siente bien jugando sin ella, pero le da algo de protección al batear y defender su posición.

Y quizás haya otro beneficio.

"Ojalá", dijo Hernández, "la codera me haga ser como Shohei".