¡Chourio sacó las escobas! Cerveceros dejaron tendidos a Dodgers y sellaron la barrida
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MILWAUKEE – Cada serie es importante para un equipo que intenta luchar con todo por llegar a la postemporada. Pero contra los Dodgers, los mejores de la Liga Nacional, simplemente se siente un poco más grande.
Entonces, no fue un partido más el del miércoles en el American Family Field, cuando el zurdo colombiano José Quintana completó seis entradas de calidad y se combinó con seis relevistas para mantener a los Cerveceros lo suficientemente cerca como para empatar el partido con un sencillo del bateador emergente Andrew Vaughn en la parte baja del novena inning, antes de definirlo en el décimo tramo, 3-2, con el primer hit de oro para dejar en el terreno del venezolano Jackson Chourio en su carrera.
El sencillo de Chourio por el lado izquierdo completó la primera barrida de su equipo sobre los Dodgers en Milwaukee, un enfrentamiento que se remonta al inicio del los encuentros interligas en 1997, cuando los Cerveceros todavía eran una franquicia de la Liga Americana que jugaba en el County Stadium.
“Fue un momento increíble”, reconoció Chourio. “Estoy feliz de que hayamos podido terminar la barrida con ese hit. Es especial. Tenemos un gran grupo de muchachos aquí”.
“Cada serie es importante, ¿verdad?”, comentó el cerrador de los Cerveceros, Trevor Megill, después de sellar la victoria del martes y antes de volver el miércoles para ponchar a los tres bateadores en la décima entrada y dejar al corredor automático de Los Ángeles en la segunda base. “Pero la intensidad aumenta [contra] los Dodgers, especialmente con la atención de los medios. Hay tres camiones de televisión extra afuera cuando llegas en auto. Definitivamente, se siente como un juego más grande”.
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Qué diferencia hizo un día. El martes, el novato de los Cerveceros, Jacob Misiorowski, y los relevistas Jared Koenig, el dominicano Abner Uribe y Megill promediaron 99.3 millas por hora con sus rectas de cuatro y dos costuras, igualando a Jacob deGrom y a los Mets del 2021 con la media más alta en cualquier encuentro durante la era de Statcast, que se remonta al inicio del 2015. Quizás por primera vez en su vida profesional, Uribe fue el último en esa lista, alcanzando un máximo de “apenas” 98.7 mph.
“Le dije que es porque sus pantalones están demasiado apretados”, bromeó el coach del bullpen Charlie Greene.
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“Realmente me gusta mucho este equipo”, dijo el manager Pat Murphy. “Realmente me gusta cómo siguen forjando su identidad. Es muy cool. Y para ser honesto, estos tres días, el público marcó la diferencia”.
Los Cerveceros atrajeron a 107,147 aficionados para la serie de tres juegos.
“Barrer a los Dodgers en casa, eso es darles a los fanáticos lo que querían, ¿verdad?”, contó Megill. “Fue increíble. Me alegra ser parte de eso, y también con la noticia del Juego de Estrellas. Esa fue una meta que me propuse en la temporada muerta, y aquí está, hecha realidad".