NUEVA YORK -- Con su velocidad élite, Chandler Simpson puede convertir incluso las jugadas de rutina en algo especial.
En la universidad, por ejemplo, una vez anotó desde segunda base con un elevado de sacrificio. Bateó un sencillo dentro del cuadro a primera base a principios de esta temporada en Triple-A. Y el hombre más rápido del béisbol volvió a lucirse en la victoria de los Rays por 7-5 la tarde del domingo en el Yankee Stadium.
Simpson anotó desde la segunda base con un sencillo dentro del cuadro del cubano Yandy Díaz, coronando un inning de tres carreras de los Rays en el Yankee Stadium, y también se apuntó un par de sencillos dentro del cuadro con conexiones que pocos jugadores de Grandes Ligas podrían convertir en hits.
“Es impresionante. Puede cambiar el juego con una jugada como esa, e incluso simplemente embasarse y permitir que un tipo detrás de ti te impulse”, dijo la estrella de los Yankees, Aaron Judge. “Definitivamente cambia el juego. Definitivamente no me emociono cuando lo veo llegar al plato o en las bases”.
Con dos corredores en base en el cuarto inning, Simpson -- quien tuvo su primer juego de múltiples robos en las Mayores el sábado -- llegó a salvo por una interferencia del receptor. Avanzó a segunda con el sencillo de dos carreras de Brandon Lowe. Luego vino Díaz, quien bateó un rodado de 107.4 mph por el centro.
El campocorto de los Yankees, el venezolano Oswald Peraza, hizo una impresionante atrapada lanzándose para evitar que la pelota pasara al outfield, pero no pudo evitar que Simpson siguiera corriendo.
“Tenía la señal de alto al pasar por tercera, y miré hacia atrás y vi al campocorto en el suelo, vi la pelota también en el suelo”, relató Simpson. “Luego vi la luz verde, así que seguí adelante”.
Mientras Peraza rodaba y se ponía de pie, Simpson corrió desde la tercera base hasta el plato, deslizándose para anotar mucho antes de que el tiro de Peraza rebotara en el montículo hacia el receptor J.C. Escarra. Según Statcast, Simpson alcanzó una velocidad de sprint de 31.3 pies por segundo, que está por encima de la marca de 30 pies/segundo que se considera élite.
“Se detiene al dar la vuelta por tercera base, y luego, en un paso, vuelve a la velocidad máxima”, señaló el manager Kevin Cash. “Eso es mucho para manejar para cualquiera defensivamente”.
“Es mucha satisfacción, el hecho de que pueda hacer eso, pero se usa como una herramienta para ayudar al equipo a ganar”, agregó Simpson. “Me alegro de haber podido usarla hoy”.